Un día tienes 16 años y al otro estás haciendo números para ver cuánto te devuelven en la declaración de la renta. Los años que pasan entre los 18 y los 25 vuelan. Literalmente. No te has dado cuenta y ahí estás, teniendo que hacer frente a un montón de tareas que ya se consideran “cosa de adultxs”. Sabes bien a qué nos referimos.
La factura de la luz, el pago del alquiler, la compra semanal, llegar a casa cansadx y tener que prepararte un tupper para el día siguiente. ¿Por qué no existe una guía para todo esto? ¿Por qué nadie nos explicó en el instituto cómo aplicar a una oferta de trabajo en la que hay más de 200 solicitudes?
Suponemos que hay cosas que cada unx va aprendiendo por el camino, igual que no todo el mundo madura al mismo tiempo. Hay quienes lo hacen una vez se independizan y hay quienes no lo hacen nunca. Todo depende del contexto. Eso sí, según la ciencia hay un momento en el que te conviertes en una persona adulta, biológicamente hablando.
Como explican desde El Confidencial, “el último hueso del cuerpo en madurar, la clavícula, lo hace entre los 25 y 35, pero los factores ambientales y socioeconómicos pueden afectar a este proceso”. Pero, claro, más allá de la biología, luego está la parte social. Muchas veces aprendemos a base de prueba y error, y eso tampoco lo explican en las escuelas. Igual, si hubiera una clase de piscología o inteligencia emocional, todo sería más sencillo.
@codigonuevo Mano arriba si tú también tienes 0 idea de ser: ADULTO🙋🏻♀️ #sos #adulto #declaracionrenta #aprendeentiktok ♬ sonido original - Código Nuevo
Nos fuimos a la calle
Para conocer más opiniones acerca de esta polémica sobre la falta de herramientas, decidimos salir a la calle y hablar con los jóvenes. Les soltamos la pregunta: ¿Tú tampoco sabes cómo ser adulto? Y ellxs respondieron: “No, no me han enseñado a ser adultx”, fue la respuesta general, pero hubo otras.
Para poner la temática sobre la mesa, les mencionamos la palabra ‘declaración de la renta’. Las reacciones fueron en la misma línea: “marrón”, “qué pereza”, “no tengo ni idea de cómo hacerla”. A raíz de estas respuestas les preguntamos cómo verían que nos lo ensañasen en Bachillerato o a finales de la ESO.
”Se nos enseñan cosas que, al fin y al cabo, luego no nos acordamos dentro de un tiempo y estas cosas que son esenciales, es que no nos las enseñan”, comentaba una de las entrevistadas.
A lo sumo, todxs coincidían en la falta de herramientas técnicas una vez llegas al mundo laboral, que es cuando parece que todo se vuelve más serio y oficial. “¿Por qué no nos enseñan a introducirnos en el mundo laboral, a hacer entrevistas?”, se preguntaba una de ellas. “Muchas veces fallas en el currículum y no sabes por qué”, añadían. Son ese tipo de cosas que no siempre se enseñan en las aulas.