A la mayoría de personas nos da miedo hacer el ridículo. Sobre todo en público. Es por eso que nunca cantaríamos delante de un grupo de personas desconocidas y tampoco se nos ocurre ponernos a bailar en el metro. Pero no todo el mundo es así, para nuestra suerte y entretenimiento. En TikTok, se ha vuelto tendencia ponerse a bailar y hacer una coreografía en el metro delante de todo el mundo, ante la estupefacción de los tranquilos pasajeros.
No es nuevo que la gente se grabe en la calle y lo suba a sus redes, pero hacerlo mientras viajas en el metro y sin que se lo esperen los demás no estaba tan visto.
La moda de las ‘Tube Girls’ empezó con Sabrina Bahsoon, una chica que tiene casi 600 mil seguidores en TikTok. Su éxito es notable: ha duplicado sus seguidores en solo dos semanas. ¿La razón? Sabrina ha sido la pionera de este tipo de vídeos super cortos, llenos de energía, en los que mueve la cámara desde distintos ángulos mientras va desplazándose dentro del metro en marcha, en Londres.
@sabrinabahsoon Delulu or manifesting ✨ #tubegirl shoutout to @In Print We Trust ♬ original sound - habz.fx
Su éxito la ha sobrepasado: ahora otras chicas también suben sus propios vídeos desde sitios tan lejanos como un bus en Turquía o Eslovaquia.
En una entrevista con la BBC, Sabrina cuenta que todo empezó porque está acostumbrada a trasladarse a todos lados en metro ya que vive muy lejos.
“Así que en el camino de regreso a casa después de una noche de fiesta, puse mi música. Y cuando estás bailando, la gente no se te acerca, te dejan en paz un poco más”, explica la nueva “icon” de la red social. Es decir, que todo empezó porque así se sentía más segura y podía disfrutar un poquito más de su viaje.
Un movimiento de chicas que bailan en el transporte público
Quizá su éxito se debe a la incredulidad de los espectadores, que nunca en la vida tendríamos la valentía de copiarla. En los comentarios, muchxs dicen que su ansiedad social se dispara solo de verla.
Sabrina también explica que sus orígenes pueden tener algo que ver con su actitud desvergonzada. Creció en Malasia y después migró al Reino Unido para estudiar Derecho en la Universidad de Durham. Malasia la ha influenciado para tener esta actitud despreocupada.
Además, le dan igual sus “haters” y la viralidad de sus vídeos le ha aportado nuevas oportunidades. Ya hay marcas que se le han acercado para colaboraciones, y ya tiene un mánager que le administra los contratos.
Pero lo más importante es el movimiento que ha empezado. Chicas que no tienen miedo a mostrarse como son, a hacer el tonto y a jugar para que después nosotrxs desde el sofá de casa podamos divertirnos y pensar: ¿qué se necesita para ser tan valiente?