Estás en un corrillo la mar de feliz charlando sobre la vida cuando una de las personas que está ahí contigo te dedica un cumplido frente a los demás. Pero no es un cumplido convencional. No es inequívocamente positivo. Es un cumplido ambiguo que no te hace sentir bien. Dentro de ti, tras esa sonrisa de agradecimiento que has esbozado, algo está gritándote que era un cumplido envenenado: un insulto disfrazado con el que la otra persona ha querido dañar tu autoestima y, muy importante, rebajar tu estatus social. Lo peor de todo es que no lo tienes claro y te marchas de ahí con la sensación confusa de no saber qué ha pasado. Has sido víctima de la técnica de manipulación llamada negging.
Procedente del mundo anglosajón, el término negging designa una táctica de manipulación destinada, según cuenta la trabajadora social Jourdan Travers en un artículo para Psychology Today, “a crear un sentimiento general de inquietud, a crear ansiedad, a crear una necesidad constante de validación y a disminuir la autoestima”. En este sentido, ser víctima del negging, especialmente de manera continuada, puede tener un impacto negativo muy profundo en tu vida. Porque te hace dudar de ti. Porque te minimiza. Porque te sitúa en situaciones opacas en las que no tienes claro cómo actuar. Por desgracia, hay muchas personas ahí afuera que las utilizan habitualmente.
Pistas para descubrirlo
Por lo general, tu instinto puede serte de gran utilidad para diferenciar entre la adulación genuina y el negging. Hazle caso. Si estás rayadx con un comentario es porque probablemente no iba con buenas intenciones. O al menos no del todo. No obstante, hay pistas muy fiables con las que puedes contar, una de las cuales es la ambigüedad. Los elogios directos son lo que son. Si alguien te dice “qué inteligente eres” es porque lo piensa. Pero si alguien te dice “eres más inteligente de lo que pareces” o “eres muy inteligente para ser X”, cuidado, porque probablemente esté tratando de insultarte a su manera. ¿Sientes esa incomodidad en tu interior? No la ignores. Es tu radar de imbéciles.
Lo curioso es que, según una investigación estadounidense, la gente elige cumplidos nítidos cuando busca agradar, pero cumplidos ambiguos cuando quiere establecer una superioridad de estatus. En este sentido, la actitud dominante de una persona, su claro deseo de estar por encima de los demás, puede ayudarte también a identificar el negging. La fuente de un mensaje dice mucho del mensaje. De ahí que Travers también avise acerca de las personas inseguras e hipersensibles al rechazo: “pueden verse involucradas en cumplidos ambiguos con más frecuencia”. Estate atento. Los problemas de amor propio de los demás no deberían salpicarte. Establece límites.