Que estés sintiendo una pizquita de celos por esx nuevx compañerx de trabajo de tu pareja tan guapx y divertidx entra dentro de lo normal. Al final, y por mucha autoestima que tengas, resulta inevitable pensar en la posibilidad de que alguien pueda privarte de un futuro a su lado. Tan solo asegúrate de gestionarlo saludablemente. Por el contrario, que sientas celos por sus experiencias románticas y sexuales del pasado, las cuales quedaron atrás y no pueden comprometer vuestro futuro, ya no es tan normal. La experta Jourdan Travers llama a estos sentimientos celos retroactivos y, dice, traen consigo una profunda angustia emocional y en muchas ocasiones una erosión de la calidad de la relación.
¿Pero por qué te obsesionas tanto con sus amores y polvos del ayer? Según esta misma especialista, hay tres factores claves detrás del feeling, el más importante de los cuales es la comparación social. Piensas en la manera en la que follaban. En el modo en el que esa ex pareja hacía las cosas fuera y dentro de la cama. En cuánto aportaba a su vida. Y te preguntas si eran mejores que tú. Nuevamente, no es un sentimiento tan extraño, pero solo sutilmente: cuando la curiosidad se transforma en competitividad contra un fantasma y en dolor la cosa pinta muy mal. Eso nos lleva al segundo factor. En palabras de Travers, “las personas con baja autoestima son más susceptibles a las comparaciones”.
No te compares con nadie
Especialmente a las comparaciones desfavorables. Es triste pero es así: tu inseguridad, tan arraigada desde pequeñitx, te hace verte como una versión pobre de sus ex. Y es triste porque no es cierto. Todo está en tu cabeza. Y también porque tú no elegiste tener esta autoimagen. Aún así, está claro que deberías ponerte en manos de unx profesional para trabajarlo. Como dice esta experta, “no abordar la inseguridad con prontitud puede introducir mucha toxicidad en tu relación”. Al fin y al cabo, ¿a quién le gusta estar con alguien que se pone enfermx con tan solo oír hablar de un ex? Tener que andar con pies de plomo no mola. Y tu susceptibilidad obliga a tu pareja a ello.
Por último, está la sensibilidad al rechazo, muy vinculada a la propia inseguridad. “Esta sensibilidad implica estar hiperalerta ante los signos de rechazo y reaccionar intensamente incluso ante palabras o comportamientos negativos menores de una pareja”. A veces incluso neutrales. Le dices a tu pareja que te encantaría viajar a Brujas. Que es un bonito destino para que los dos la visiten por primera vez. Te cuenta entonces que ya estuvo en el pasado con una ex pareja. Es solo un dato. Te lo cuenta por honestidad. Pero tú te sientes rechazadx de alguna manera y pierdes la compostura. No lo sientes como algo pasado. Sientes que le prefiere ahora. ¿Absurdo? Sí. Pero así son los celos retroactivos.