La diferencia entre celulitis y piel de naranja que ‘Barbie’ ha sacado a la luz

La celulitis como tal no es lo que nos han hecho creer las marcas de cosmética

Cuando en la película Barbie empieza a sufrir los cambios y a dejar de ser una Barbie Estereotípica, no puede evitar sentirse horrorizada por los hoyuelos que le aparecen en los muslos. Entonces la Barbie Rara le dice a nuestra Margot Robbie que eso es celulitis. Y muchas nos reconocemos en esa escena de apretarse la carne para constatar el relieve.

Pero en realidad, una vez más nos la estaban colando. Y no, no estamos hablando ya de la presión estética por no tener celulitis. Una meta detrás de la cual millones de mujeres se dejan miles de años comprando cremas y tratamientos que no sirven de nada. Si no que nos estamos refiriendo a que ese relieve que te aparece en los muslos cuando aprietas no es realmente celulitis. De hecho, nunca lo ha sido.

Hasta hace 50 años estos hoyuelos que se dibujan en la mayoría de piernas, muslos, brazos y glúteos de las mujeres eran normales. Basta mirar los cuadros de Rubens o muchos otros artistas para apreciar estos relieves. Nunca fueron vistos como algo negativo, si no que era tratado como algo normal y que formaba parte del cuerpo femenino.

Esta característica, que tiene entre el 85% y el 90% de las mujeres, surge cuando las células que se encuentran en nuestra piel y que son las encargadas de almacenar grasa con el objetivo de protegernos contra el frío, se acumulan hasta que acaban sobresaliendo de la epidermis y se hace visible una especie de red con bultitos pequeños. Esto tiene un nombre y no es celulitis, sino piel de naranja.

La celulitis real es una infección en el tejido adiposo subcutáneo acumulado en zonas específicas del cuerpo, lo que provoca la aparición de nódulos de grasas y toxinas.

Lo que se denomina piel de naranja o científicamente, dermopaniculosis, empezó a llamarse celulitis cuando la Vogue en la decáda de los años 20 publico un artículo titulado: “Celulitis: la grasa que no se podía perder antes”.

Este artículo tenía como objetivo promocionar unos servicios de spa y belleza en Francia que ofrecían diferentes tratamientos corporales. Pero claro, el término apareció publicado en la Vogue y de repente muchas mujeres empezaron a ver un defecto que nunca antes habían tenido.

Este complejo se fue repitiendo tanto socialmente que ya no solo saco tajada el spa francés, sino las farmacéuticas y líneas de cosmética. Hasta nuestros días donde aún siguen haciendo negocio de ello. Por lo que no, Barbie en la película no tiene celulitis, tiene piel de naranja. Una condición muy común y que en la mayoría de casos tiene o bien causas hormonales o bien genéticas.