Del autocuidado a la autocondena: cuando el self-care se convierte en una obsesión

Descubre las señales de alerta para detectar cuando el cuidado de tu bienestar se convierte en una presión social para encajar a estándares estéticos

¿Te suenan frases como ‘tiempo para mí’, ‘día de mimos’ o ‘prémiate’? ¡Claro que sí! El autocuidado se ha convertido en tendencia, especialmente desde el inicio de la pandemia. Se comparte en redes sociales y se vende como ese momento de relax en medio de la rutina, un momento para sentirnos bien con nosotros mismos. Pero, ¿es tan sencillo como parece?

La base del autocuidado es dedicarse un tiempo para sentir bienestar físico y mental. Como dice la psicóloga experta en imagen corporal, Raquel L. Rubio, “son aquellas acciones o tareas cuyo objetivo principal es proporcionar bienestar en nuestra salud física y mental”. No es solo seguir una rutina de skincare, sino entender lo que realmente necesitas en cada momento.

Elena Ramos y Marta Barrero, farmacéuticas expertas en dermocosmética, afirman que el autocuidado es “la capacidad que tiene una persona de buscar y proteger su bienestar, sabiendo interpretar las señales que le manda su cuerpo y regalándose momentos de relax y disfrute, que le vuelven a reconectar consigo mismo”. Es un acto de amor propio que va más allá de la apariencia exterior.

Pero cuidado, no todo es tan simple. El peligro está en convertir este autocuidado en obsesión, en querer encajar en ciertos moldes estéticos que vemos en las redes sociales. Las redes pueden mostrarnos solo un 1% de la vida de una persona, creando expectativas inalcanzables e irreales. La experta Raquel L. Rubio nos aconseja hacer una pausa y reflexionar si estamos cayendo en esta autocondena. ¿Nos estamos comparando de forma injusta? ¿Nos sentimos mal si no seguimos ciertas rutinas?

La industria de la belleza y el bienestar ha evolucionado. Ya no se trata solo de sentirse socialmente aceptado, sino de sentirte bien contigo mismo. Este cambio se ha reflejado en frases como ‘hazte sentir bien’, ‘prémiate a ti mismo’, que nos animan a potenciar nuestros puntos fuertes y aceptarnos tal y como somos.

Por supuesto, esto no es solo una moda. El Huffington Post nos revela unos datos que son claros: la industria cosmética y del bienestar está en auge. En 2021, la industria cosmética generó 8.211 millones de euros, y el consumo de productos para el cuidado de la piel y el cabello aumentó significativamente. A nivel mundial, la industria del bienestar generó 4,4 billones de dólares en 2021 y se espera que alcance los 7 billones en 2025. ¡Estamos invirtiendo en nuestro bienestar!

Así que sí, el autocuidado es tendencia, pero también es una beneficio que debe adecuarse a lo que tu necesitas sin caer en presiones. Es dedicarse tiempo, escucharse a uno mismo y encontrar ese equilibrio entre cuidar de nuestra salud física y mental. ¡No olvides que tú vales mucho y te mereces sentir bien!