Se habla mucho del self care pero no siempre tiene que ir asociado al cuidado de la piel o a quedarse una noche solo en casa. El autocuidado es un concepto clave que se utiliza en la terapia psicológica para que los pacientes aprendan a cuidar tanto su cuerpo como su mente, para así poder enfrentarse a cualquier malestar o situación desagradable que se les pueda presentar.
¿Qué es el autocuidado?
El autocuidado se refiere al cuidado de uno mismo, así de simple. Pero ojo, no solo tiene que ver con un cuidado físico como se pueda pensar, también va a través de aprender a poner límites, de escucharse a uno mismo y de hablarse bien. Se divide generalmente el en autocuidado social, mental, emocional y físico. En este post te traemos algunas ideas para autocuidarte.
1. Gestiona
Si tienes esa idea en la cabeza que no se te va... gestiónala. Puede ser una conversación pendiente con un amigx, una conversación con unx mismx o incluso una actividad que siempre se te hace bola, como puede ser ordenar tu habitación. Escucha lo que te pide tu cuerpo y gestiona para seguir adelante.
2. No es no
Saber decir que no, es una de las claves fundamentales en el autocuidado. Si tu mente sabe que no quiere estar en x lugar es momento también de que tu cuerpo lo exprese, di que no a planes o cosas que te hagan daño. Di que no a las actitudes autodestructivas o a tomar algo más si tu cuerpo te pide un descanso, en un futuro lo agradecerás.
3. El descanso es clave
Descansar es súper importante para cuidarse, pero no tienes por qué tumbarte a dormir o quedarte parado con una película o serie, hay muchas más maneras de descansar la cabeza y relajarse. Descansar también puede ser sentarte a escuchar música o pasear a solas por la ciudad, en esos descansos permite que los pensamientos positivos ocupen tu mente, y si vienen los negativos vuelve al punto 1 de esta guía.
4. Escribe
Cuando estamos en caliente se nos ocurren cientos de cosas que más tarde no recordamos, una buena manera de liberar los nervios y el agobio es escribirlas. Cuando las consultes en frío verás que no era para tanto, y muchas veces escribir algo es cómo contárselo a un amigo (muy íntimo) y te das cuenta de lo que realmente te preocupa. Te recomendamos que escribas las cosas que te pasan, duermas y al día siguiente las leas a ver cómo recibes esa información.
5. Yo te cuido, tú me cuidas
Si te cuesta saber cómo mimarte te recomendamos que llames a alguno de tus amigxs de más confianza. Organizad un plan tranquilo que os encaje a ambos en los que poder hablar únicamente de lo que estéis haciendo (un puzle, cerámica...) de esta manera puedes descansar de tu propia cabeza y a la vez vivir un rato de relajación con alguien muy cercano.