Todo lo que sabemos sobre los casos de abuso sexual de Nickelodeon: actores y actrices que han hablado

Las actrices de Zoe 101, The Amanda Show, iCarly serían algunas de las víctimas

Zoe 101, The Amanda Show, iCarly son algunas de las series con las que nos quedábamos enganchados delante de la tele los sábados por la mañana. Para muchos forman parte de nuestro imaginario preadolescente. Lo que no sabíamos por ese entonces es la aterradora historia se escondía entre las bambalinas de Nickelodeon, la cadena que se encargaba de crear estos programas.

Dinámicas abusivas, discriminación, agresiones sexuales y pederastia: todo esto ocurría en los sets de grabación de estas series sin que nosotros nos enteráramos. Ahora el documenta Quiet on Set: The Dark Side of Kids TV lo ha sacado a la luz. El documental se divide en cuatro partes y destapa los abusos cometidos por el creador, showrunner, guionista y productor Dan Schneider.

Una de las víctimas de Schneider fue Amanda Bynes, protagonista de The Amanda Show. Byne reveló que sufrió agresiones sexuales durante su niñez y adolescencia a manos de él. De hecho, en los sets de Nickelodeon siempre se los veía juntos y algunos de los trabajadores comentaban que Amanda Bynes y Schneider actuaban como si fuesen pareja.

Las guionistas de The Amanda Show, Jenny Kilgen y Christy Stratton, denunciaron que se les obligaba a compartir un salario y enfrentaban comentarios y exigencias inapropiadas, como solicitar que les masajearan el cuello mientras estaban en el set.

Dan Schneider persuadía con alcohol a las menores

Otra de las actrices que podría haber sufrido abusos a manos de Schneider sería Jamie Lynn Spears. Sí, la prota de Zoey 101 y hermana de pequeña de la cantante Britney Spears. A los 16 años se quedó embarazada y según se rumoreaba en los blogs se decía que la hija pertenecía a Schneider.

La protagonista de iCarly, Jennette McCurdy, desveló den 2022 que un alto directivo, a quien ella se refirió como “El Creador”, la persuadió para beber alcohol siendo aún menor de edad, además de que la presionó para hacer una sesión de fotos de ella en poses sugerentes. Todo ello acabo en un cuadro severo de trastornos alimenticios.

En su libro I’m Glad My Mom Died, McCurdy explica que cuando su contrato con Nickelodeon acabo, intentaron comprar su silencio. “Te están dando 300 mil dólares, lo único que quieren es que hables públicamente de tu experiencia en Nickelodeon”.

Ella al final rechazó la oferta, pero viendo este precedente es muy probable que otros actores aceptaran ofertas similares cuando acabó su contacto. Esto explicaría por qué pasaron tantos años antes de que finalmente se confirmaran parte de las acusaciones contra Schneider.