Por qué tantas parejas discuten acerca del sacrificio

Las intenciones, las expectativas y la percepción de la personalidad de la otra persona influyen en cómo reciben estos actos

Si algunas vez en tu vida, en un acto de fantasía mental, has pensado siquiera por un segundo que puedes tener una relación romántica sin un solo ápice de sacrificio en ella, tienes que saber que efectivamente estabas medio delirando. Porque sí, los sacrificios son parte de la pareja, la cual requiere de negociaciones y concesiones casi permanentes. Tanto a pequeña escala como a gran escala. No obstante, y como apunta la experta Jourdan Travers, “hacer sacrificios en las relaciones románticas es un delicado acto de equilibrio”. Tanto dando como recibiendo te pueden llevar a discusiones tremendas. ¿El motivo? Tres factores claves que determinan cómo se sienten esos sacrificios.

El primero de ellos es la intención. Porque no es lo mismo que te sacrifiques para promover el bienestar de tu pareja que con un fin oculto de autobeneficio. En este sentido, dice Travers, “un estudio publicado en Emotion señaló que los sacrificios basados en motivos centrados en la pareja tienden a hacer que esta se sienta agradecida, mientras que los sacrificios basados en motivos centrados en uno mismo o en motivos centrados en la relación no fueron recibidos con la misma gratitud”. Es más, en algunas ocasiones provocan conflictos, pues la persona que recibe el sacrificio percibe este como una especie de manipulación o de acto egoísta. Algo le escama. Algo le genera rechazo.

Por otro lado, está el factor expectativa. En palabras de esta especialista, “un estudio de 2019 publicado en el Journal of Social and Personal Relationships mostró que las expectativas de sacrificio de una persona, sus creencias de que los sacrificios sean necesarios, normales y esperados en las relaciones o no, afectan a cuánto aprecia los sacrificios de su pareja”. Por ejemplo, si tu pareja tiene una idea muy férrea sobre lo importantes y lógicos que son los sacrificios, tenderá a agradecértelo menos dado que los considera normales. Por el contrario, una pareja que no espera demasiado, que no ve los sacrificios como algo obligatorio, tenderá a agradecerlos más.

Por último, la recepción de los sacrificios, y la buena onda o mala onda que surge tras ellos dentro de una pareja, está muy condicionada por la percepción que tiene la otra persona de la personalidad de quien se sacrifica. En este sentido, otro estudio, este de 2022 y publicado en la revista especializada Journal of Personality and Social Psychology, probó que cuanto más cariñosx, comprensivx, validadorx y receptivx te perciba tu pareja más positivamente interpretará tus sacrificios. Porque es menos probable que los lea como un comportamiento egoísta o manipulador. En cualquier caso, y si estáis teniendo movidas con esto, habladlo. Es siempre el único camino.