La has cagado muchas veces en el amor. Te dejaste llevar por los cantos de sirena, y por la increíble cascada de dopamina que te provocaban, y escogiste a las personas equivocadas. Le ocurre a todo el mundo. Por eso ahora tienes tantísimo cuidado a la hora de mezclarte sexualmente o románticamente con alguien. Sabes que puede salirte rana. Que no todo es siempre tan bonito como parece. ¿Pero sabes qué? No es exclusivo de las relaciones amorosas: también puedes elegir a las personas equivocadas cuando se trata de amistad. Y es igual de putada. Como explican desde El Confidencial, “las traiciones son más frecuentes de lo que parece y no todas las amistades son un camino de rosas”.
¿Cómo escoger con sabiduría? Desde dicho medio recomiendan tener en cuenta las disquisiciones del filósofo griego Aristóteles, quien en sus escritos diferencia entre tres tipos de amistad distintas. En primer lugar, aquella que tiene lugar por interés, “cuando ambos comparten la misma razón instrumental que les hace extraer un beneficio recíproco”. En segundo lugar la amistad por placer, la que se da con “amigos con los que simplemente te lo pasas bien” pero con los que no hay una intimidad compartida. Apenas hay confesiones emocionales. Apenas hay profundidad. Apenas hay vulnerabilidad. Todo se mueve en los límites de lo superficial pero con mucho humor o buena conversación.
La amistad que lo soporta todo
Por último, y la más importante, está la amistad perfecta. “Esta clase de amigos, que podríamos englobar en la categoría de ‘para siempre’, acaban forjando una especie de mundo común y compartido de signos, mitos y recuerdos, a partir de un curioso sentimiento de complicidad y de unión que les hace querer vivir en proximidad”. Son esxs amigxs que llevas en tu corazón. Esxs a los que tenderías tu mano bajo todo tipo de circunstancias y que sabes perfectamente, en el fondo de tu alma, que harían lo mismo contigo en cualquier situación. Son las amistades a las que acudes cuando las cosas van verdaderamente mal. Cuando ya no puedes más. Cuando tienes miedo o estás en la mierda.
Y tener claras estas tres variedades de amistad es muy importante para escoger a tus amigxs con precisión. Al fin y al cabo, se trata de ver en la gente el potencial para encajar en una u otra categoría y no cagarla creándote expectativas poco realistas acerca del papel que jugarán. No. Esa no será una amistad perfecta. Aterriza. Además, y como explican desde El Confidencial, reconocer esta tipología te ayudará también a dar prioridad a los lazos de amistad que realmente valen la pena. “Siempre hay un momento en el que tienes que decidir con quién quieres estar y a quién dedicar más o menos tiempo”. Piensa en la gente a tu alrededor. Ubícalos. Y reparte esfuerzos en consecuencia.