Dos jóvenes denuncian en un vídeo el acoso que muchas otras sufren en Magaluf

"Estamos hartas. Hemos vuelto a la piscina y más hombres haciendo lo mismo, tratándonos como perros"

El acoso machista ha irrumpido con fuerza en Magaluf, Mallorca. Dos chicas jóvenes estaban disfrutando de unas vacaciones cuando, de repente, se vieron rodeadas de actitudes sexistas por parte de turistas, camareros y del mismo empleado de seguridad en el hotel en el que se hospedaban. Ante esa situación de desamparo e indignación, las dos chicas optaron por denunciar lo ocurrido en un vídeo, que se hizo viral en Twitter, y avivó las críticas de usuarios que solo pudieron condenar los hechos.

"Estamos en el hotel Barracuda, y hacemos este vídeo porque estamos sufriendo un acoso machista más grande que nuestras cabezas", dijeron las jóvenes al comienzo de un vídeo de dos minutos en el que detallaron como, por unos instantes, les habían fastidiado las vacaciones. "Vamos a la piscina y nos reciben unos franceses entre aplausos y al grito de 'guapa, siéntate aquí'. Les hemos contestado y hemos pasado", explicó una de ellas para, acto seguido, añadir que al llegar a la cena tuvieron que pasar por “más de lo mismo”.

Aquello hizo que abandonaran el restaurante del hotel enervadas sin saber que, en unos momentos, volverían a toparse con otra realidad machista. "Estamos hartas. Hemos vuelto a la piscina y más hombres haciendo lo mismo, tratándonos como perros. Hemos llamado al segurata y hemos hablado con él".

Pero, sin esperarlo, uno de los peores rostros de su viaje a Magaluf llegó justo con ese empleado del hotel. “Para empezar, me ha saludado mirándome las tetas. Después ha dicho que no está aquí para cuidar a tres chicas", contó indignada una de las jóvenes. Después, su amiga continuó con el relato y recordó la mentalidad retrógrada que aún tienen muchas personas en nuestro país: “¿Y sabéis como ha terminado la conversación? Diciéndonos: 'yo tengo dos hijas, una de 15 y una de 25 y jamás se han vestido como vosotras'".

Se trata de una respuesta que hace a las jóvenes responsables de la estupidez, el machismo y la falta de control de los demás, por lo que es más que justificable que esas palabras hicieran subir su irritación como la espuma. “Me voy a vestir como me salga del coño. Tú no eres quien para decirme como vestirme. Y menos decir que el acoso machista es por culpa de nuestra vestimenta", dijeron para después expresar con desencanto que no lograban entender porque todo el mundo que se cruzaron les había hecho algo. Aunque, ese pensamiento no les hizo dejar de reivindicar lo que consideran justo: "No lo vamos a solucionar pero no nos vamos a callar".