Diseñan unas bragas machistas para esconder las ‘inseguridades’ de las mujeres

Lorals ha creado unas bragas machistas y ultrafinas para que las mujeres escondan sus posibles inseguridades mientras les practican sexo oral.

A pesar del evidente aperturismo sexual que estamos viviendo, desprendiéndonos poco a poco de los prejuicios y complejos, todavía hay empresas que desgraciadamente intentan hacer negocio de las complejos personales poniendo barreras a la sexualidad, nunca mejor dicho. La marca de lencería Lorals ha creado la primera ropa interior femenina diseñada específicamente para llevarlas durante el sexo oral. El objetivo, explican, es darle la posibilidad a las mujeres de esconder preocupaciones tan absurdas y del siglo pasado como la forma de sus labios vaginales, el olor y los fluidos que pueda desprender o si la zona está lo suficientemente depilada o no.

"Decidí que era necesario que hubiera un producto bien diseñado que ayudara a las mujeres a decir sí al sexo oral y les ayudara a sentirse sexys, hermosas y seguras, ya sea en unas vacaciones de lujo o en sus vidas cotidianas", explicaba recientemente a Bustle la fundadora y CEO de la empresa, Melanie Cristol. Y es que, según afirman desde la propia compañía en base a sus propias investigaciones, al menos el 80% de las mujeres dicen no al sexo oral aunque lo deseen por algún tipo de vergüenza. Algo que Lorals trata de evitar con estas bragas ultrafinas, antiporosas —aunque aún no ha sido demostrado que prevengan enfermedades de transmisión sexual— y desechables que saldrán al mercado el próximo mes de marzo.

"Crean una barrera entre la boca y nariz de tu pareja y tu vulva y ano durante el sexo oral. Nuestras bragas sedosas y elásticas se amoldan a tu cuerpo, permitiendo que la lengua y la boca de tu pareja se muevan completamente. El material de lujo no poroso proporciona una estimulación adicional al clítoris y los labios mientras evita el olor, el sabor y la transmisión de líquidos”, explicaba Cristol a Cosmopolitan. Una barrera que, después de todo, no hace sino fomentar el body shaming y la autocensura. Y es que la única solución válida pasa por la aceptación absoluta, de mujeres y hombres, del cuerpo y la sexualidad. ¿No crees?