Señales de que podrías ser una persona superdotada

Que unas malas notas no te hagan sentir que no vales lo que vales

Durante muchísimo tiempo el rendimiento académico fue la vara de medir de las capacidades cognitivas. Si eras de lxs primerxs de la clase te podías ganar la medallita de superdotadx y si tus notas eran un desastre te ganabas el estigma de tontx. Así de sencillo. Así de dicotómico. No obstante, la evolución de la psicología llevó a la idea de que el rendimiento académico no reflejaba el potencial intelectual en todos los casos, pues entran en juego otras variables fundamentales como la motivación. Un panorama que desemboca en una pregunta clave: ¿cómo puedes saber entonces si tienes habilidades mentales por encima de la media? Pues hay una serie de signos que pueden ayudarte.

Como el hecho de que suelas aprender muy rápido. Según asegura el neurofisiólogo Ronald J. Swatzyna en un artículo en la revista BestLife, “las personas con un coeficiente intelectual alto tienen la capacidad de captar nuevos conceptos rápidamente”. Lo que popularmente se viene conociendo como cogerlas al vuelo. Pero no solo eso: además son capaces de recordar lo aprendido durante muchísimo tiempo gracias a una memoria a largo plazo privilegiada. Aunque ojo: es una memoria a largo plazo selectiva que retiene conceptos que resultan interesantes, pero que puede olvidar cosas mundanas. Después de todo, no es un servidor informático con petabytes infinitos.

¿Cuánto sabes de emociones?

¿Te consideras una persona muy consciente de sus propias emociones? ¿Sabes reconocer adecuadamente las emociones ajenas? ¿Controlas tu impulsividad sentimental? Si has contestado sí a todo significa que probablemente tengas una muy alta inteligencia emocional y, al contrario de lo que suele pensarse, lxs superdotadxs suelen presentarla. Sí, hay genixs muy torpes emocionalmente en los libros de historia, pero, como explica la psicóloga clínica Leslie Dobson en el mismo artículo, “cuando las personas tienen un coeficiente intelectual alto generalmente veo la capacidad de mantener muchos pensamientos en la cabeza y al mismo tiempo sentir emociones”.

Y quedan otras tres pistas. En primer lugar, una gran capacidad para comunicar ideas complejas en términos simples, pues eso requiere de un alto grado de sintetización, estructuración y presentación de la información. En segundo lugar, muchísima resolución. Las personas con altas capacidades “poseen un estilo de pensamiento rápido y preciso, lo que les permite afrontar desafíos intrincados”. Y en tercer lugar, un nivel de pensamiento crítico de la ostia. En palabras de Swatzyna, “pueden evaluar información objetivamente, establecer conexiones entre conceptos aparentemente no relacionados y hacer juicios precisos basados en razonamiento”. ¿Qué? ¿Te ves súper?