Los dobles grados han proliferado enormemente en los catálogos de las universidades españolas durante la última década. Entre otras cosas, porque muchxs jóvenes parecen dispuestos a dedicar muchos más esfuerzos a los estudios con tal de no renunciar a alguno de sus intereses y profundizar en más áreas de conocimiento. ¿Qué? ¿Tú también te lo estás pensando? Pues debes meditarlo bien. Como explica en un artículo en The Conversation la vicerrectora de Política Académica y Calidad de la Universitat de Barcelona, M. Pilar Delgado, este itinerario formativo requiere más dedicación, más inversión económica y más años en la uni. Eso sí: también proporciona beneficios muy jugosos.
El primero de ellos, escribe esta experta, es la posibilidad de combinar diferentes intereses. En ocasiones esto es una pequeña ventaja porque le añade gracia a tu recorrido universitario. Otras es una ventaja colosal porque estás indecisx entre dos carreras y el doble grado te permite no tener que desistir de ninguna de ellas y pasarte la vida preguntándote cómo habrían sido las cosas de haber tomado la otra decisión. Sales de la uni con todo el paquete de conocimientos que querías. Además, y si uno de los grados es con una universidad internacional, te permite “perfeccionar una segunda lengua, desarrollar habilidades interculturales y conocimientos específicos de otro país”.
Mayor flexibilidad
Pero probablemente los mayores beneficios de estudiar un doble grado vengan después de haber completado los estudios. En palabras de la vicerrectora, “los empleadores valoran de los estudiantes que cursan un doble grado la flexibilidad, la capacidad de esfuerzo, así como la capacidad de adaptarse y abordar los problemas desde diferentes perspectivas, derivada de tener conocimientos y habilidades en dos ámbitos distintos”. O dicho de otra manera: si hay dos candidatos para un puesto que requiere una titulación y uno de ellos tiene, además de dicha titulación, otra complementaria, es más probable que opten por este último porque podrá aportar mucho más.
Además, estar graduadx en dos carreras te da la posibilidad no solo de competir mejor en los puestos relacionados con una de ellas, sino también y como es lógico tener a tu disposición una mayor oferta de empleos. Al fin y al cabo, puedes postularte a los que se derivan de las dos profesiones que has estudiado. Según Delgado, “la combinación de conocimientos de dos ámbitos da como resultado una carrera profesional más amplia, permitiendo a los graduados buscar trabajos que involucren uno de los grados cursados, ambos ámbitos de conocimiento o incluso encontrar perspectivas profesionales únicas en la intersección de ambos. ¿Qué? ¿Te animas?