5 actitudes de la antigua Grecia que nos sirven para vivir la vida hoy

La filosofía clásica está más vigente de lo que muchxs creen. Aquí algunas ideas que ya estudiaron los estoicos

Los estoicos formaron una de las corrientes filosóficas más curiosas de la Antigua Grecia y, aunque no tuvieron que lidiar con problemas actuales como el cambio climático, TikTok, o el debate sobre la pizza y la piña, muchas de sus actitudes aun hoy nos pueden ser útiles. Apatía, expectativas o el clásico “¿qué es lo peor que puede pasar?”, son algunas de las enseñanzas de entonces que todavía hoy nos pueden servir.

El estoicismo, hoy día reconvertido a adjetivo que significa “fuerte, ecuánime ante la desgracia”, fue fundado por Zenón de Citio, nacido en el año 334, y que defendía ideas como que el hombre alcanza la felicidad cuando abandona las pasiones extremas.

El digital La Mente es Maravillosa ha destacado en un artículo reciente cinco actitudes de los estoicos que nos pueden ayudar hoy en día. El primero de todos viene a ser como entrar en una librería y preguntar: “¿No tendrás este libro, verdad?”. La pregunta se anticipa al peor de los escenarios, lo da por hecho, de forma que rebaja las expectativas al mínimo y convierte alcanzar el objetivo en un éxito brutal. Es lo que por aquel entonces los estoicos llamaban “visualización negativa”. Aquel “tú ponte en lo peor”, que tantas veces te dice tu amigx y que te sirve para ver que la cosa no es tan grave como aparenta.

En segundo lugar, se encuentra el determinismo fatalista de los estoicos, para los cuales la vida era un pulso constante entre la voluntad y el destino. Así, aunque Séneca, uno de los destacados estoicos, recordaba que la filosofía no era válida ante un destino ya escrito, también resaltaba que era mejor hacer el bien, dominar las pasiones y actuar con templanza por el mero deber de hacerlo y porque, justamente, si un mal ha pasado y no se puede borrar, el tormento sirve de poco. Eso sí que es “tomarse las cosas con filosofía”.

Elige bien a lxs que están a tu lado

En tercer lugar, el digital destaca la importancia de tener buenos compañeros de viaje en la vida. La amistad, de hecho, era uno de los pilares de los estoicos para que te vaya bien en la vida. Para que luego digan que es nuestra generación quien los ha puesto más en valor.

La cuarta actitud a tener en cuenta es la racionalidad, el sosiego, la templanza, la capacidad de responder, por ejemplo, con tranquilidad y educación incluso cuando te ofenden o insultan.

Es cierto que el autocontrol de las pasiones que recomendaban los estoicos choca un poco con la visión emocional de la mayoría de psicólogxs de hoy en día, que creen que es importante sentir las cosas y además expresarlas. Pero también es cierto que, una vez sentido el odio, la rabia, la ira o la tristeza, domesticarlo es un buen camino a la felicidad para que no te carcoma. Y por ahí, creemos, iban los tiros de nuestros amigos estoicos.