Estos últimos meses hemos visto horrorizadxs el caso de Gisèle Pelicot, la mujer a la que su marido drogó para que otros hombres la violaran mientras ella estaba inconsciente, en Francia. Un caso que nos ha demostrado que la violencia sexual la puede ejercer cualquier tipo de hombre y que no son “monstruos” quienes lo hacen, sino personas común y corrientes.
Mientras todxs veíamos cómo Gisèle cambiaba el relato de la violencia sexual y decidía que la vergüenza estuviese del otro bando, en Estados Unidos estaba saliendo a la luz otro caso de agresiones sexuales que también nos demuestran lo lejos que estamos de erradicar este problema social. Estamos hablando de la oleada de denuncias que ha habido contra el rapero y productor Sean “Diddy” Combs, de 54 años.
El pasado 16 de septiembre fue detenido y encarcelado en Brooklyn, Nueva York, provisionalmente con cargos de tráfico sexual, asociación ilícita y transporte para ejercer la prostitución. La Fiscalía sostiene que desde 2008 cometió delitos como tráfico sexual, violación, conspiración de crimen organizado, trabajos forzados, soborno, secuestro, incendio provocado y obstrucción a la justicia.
Además, esta semana otras 120 personas, incluidas mujeres y hombres, lo han acusado de abusos sexuales en un caso paralelo. Algunas de estas personas eran menores de edad en el momento de los hechos, que empezaron en la década de los 90 en eventos musicales donde las víctimas fueron drogadas.
Entre los denunciantes hay el caso de un niño que tenía 9 años cuando Diddy, conocido también como Puff Daddy, le violó presuntamente en su estudio, y otro menor de 15 años que también sufrió abusos.
¿Pero quién es Sean “Diddy” Combs?
Si su nombre no te suena, estamos hablando de un músico que le ha producido temas a artistas de la talla de Mariah Carey, Beyoncé o Usher.
Comenzó su carrera como productor musical en la década de 1990. Con su sello discográfico Bad Boy Records en 1993 impulsó la carrera de grandes artistas del hip-hop y el R&B, como Notorious B.I.G., Mary J. Blige y Usher.
Nacido en Harlem, Nueva York, Estados Unidos, el 4 de noviembre de 1969, es padre de siete hijos. Ha estado rodeado de pesos pesados de la industria, y llegó a salir con Jennifer López entre 1991 y 2001.
Aparte de su sello discográfico, sus temas han llegado a ganar mucho reconocimiento en la industria musical. Ha ganado cuatro Premios Grammy y ha formado parte de canciones e impulsado las carreras de Mariah Carey, Beyoncé o Britney Spears.
Aparte de rapero y productor, también es un hombre de negocios, con marcas de moda, su propia marca de vodka y canales de entretenimiento.
Pero en 2023 salió a la luz la primera demanda. Su exnovia Cassie Ventura lo acusó de abusos, violaciones, amenazas y palizas, y aunque retiró la denuncia 24 horas después, su paso adelante sirvió para que otras víctimas se atrevieran a contar su historia.
En Estados Unidos hace tiempo que este caso ha creado un gran revuelo, y se ha señalado a cantantes famosos por su amistad con Sean “Diddy” Combs. Por ejemplo, Beyoncé llegó a perder más de cinco millones de seguidores en Instagram por su amistad con el cantante. Vamos a ver cómo acaba este caso, que ofrece tintes de ser un nuevo ejemplo de cómo hombres poderosos utilizan su influencia para violar y agreder sexualmente a las personas con las que se cruzan por el camino.