Tres posturas sexuales que te dan placer y con las que tonificas glúteos

La amazona, la amazona invertida o el puente son tan deliciosas como exigentes

Antes de nada: con el sexo no cubres ni de lejos las recomendaciones de actividad física de la Organización Mundial de la Salud. Aquello de no voy al gimnasio pero follo todos los findes no cuela. Para que compensara tendrías que follar muchísimo más. Dicho esto, no puede negarse que se trata de un excelente complemento para tu salud física. Al fin y al cabo, y a menos que seas unx flojx egoísta que adopta siempre posturas pasivas para no tener que moverse ni una pizca y que sea la otra persona quien haga todos los esfuerzos, el sexo implica trabajo aeróbico que mejora tu sistema cardiovascular y, además, fortalece tus músculos con las posturas adecuadas. Incluidos los glúteos.

Una de estas posturas es la de la amazona. En ella, explican desde Trendencias, “la persona que penetra se coloca tumbada boca arriba y la persona penetrada se sienta sobre ella como si montara a caballo”. La idea para que trabajes bien los músculos de tu culo es que lo levantes una y otra vez en lugar de moverlo hacia delante y hacia detrás. De esa forma realizas una especie de falsa sentadilla. Y sí, notarás que el ritmo cardíaco y la respiración aumentan y que los glúteos te queman un poquito, pero a la larga notarás los resultados: un culo mucho más tonificado a base de polvos. Lo bueno es que tú tienes el control y marcas la intensidad y los descansos. A tu gusto.

Otras posturas sexuales

Y hablando de gustos, también puedes optar por la amazona invertida, en la cual no miras hacia la cara de tu pareja sexual sino que le das la espalda. Quizás porque quieres que disfrute de las vistas. O tal vez porque te sientes más cómoda no teniendo que mantener una conexión visual con nadie. Da igual. En cualquier caso, dicen desde dicho medio, “si quieres quemar mucho más no te sientes, apoya los pies y quédate en cuclillas”. Y ahí sí que notarás la quemazón muscular. Eso sí: estarás trabajando tanto las piernas como los glúteos a tope. O tienes una gran forma física o terminarás reventada muy pronto. Para empezar quizás sea bueno ir alternando dificultades.

Por último está el puente. “Consiste en que la persona penetrada se tumbe boca arriba, con las rodillas dobladas y los pies separados a la altura de las caderas, los hombros y la cabeza apoyados como en una postura de yoga. La persona que penetra se coloca de rodillas frente a la otra persona y listo: deporte y sexo unidos”. Es decir, que aquí trabajáis duro lxs dos. ¿Y si no queréis penetración? Se puede adaptar para un cunnilingus o una felación. Sea como sea, notaréis que estáis dándolo todo porque tus músculos estarán trabajando en todo momento para mantener la estabilidad de la postura y no caeros. Cosa que, si pasa, merece unas risas y a seguir.