A ver no, no tenemos cinco años. Pero el concepto de “dar guijarros” puede que te recuerde a cuando eras un crío y le dabas tu rotulador favorito a la persona que más te gustaba de clase. Y en parte es esto: se trata de compartir pequeños objetos o contenidos con alguien para establecer un vínculo.
Este término proviene de la conducta de los pingüinos Gentoo, que en la Antártida expresan su interés en aparearse al recoger y dar piedras a su pareja potencial. Los guijarros son cruciales para los pingüinos Gentoo, ya que las usan para construir nidos, y el hecho de seleccionarlas cuidadosamente demuestra dedicación y atención. Esta conducta tan moni ahora sirve para hablar de los detalles en las relaciones.
El término sirve para referirse a esos pequeños objetos, sin valor aparente, pero que muchas veces se empiezan a compartir y regalar al inicio de una relación. Ya sea desde el posavasos del bar donde os conocisteis, hasta flores, bombones o bien esa típica foto de carne que después guardas en la funda del móvil. Al final, la gracia de estos regalitos o guijarros es que son la expresión de una atención especial a la otra persona. De hecho, muy posiblemente se conviertan en objetos mucho más valiosos y simbólicos que cualquier regalo que puedas comprar.
Con el auge de las redes sociales y las interacciones digitales, el concepto de dar guijarros también ha adquirido un matiz digital. Un gran ejemplo son esos memes de perretes y gatetes de “esta soy yo cuando duermo contigo y sin ti” o similares. Se trata de publicaciones que se comparten a través de los mensajes privados y que también son una manera de mostrar aprecio a la otra persona y decirle uqe estas pensando en ella.
Si quieres regalar guijarros a esa persona que estás conociendo, es importante que valores el contexto. En persona intenta buscar pequeñas cosas que os recuerde a vosotros, o que te recuerden a ella. A través de las redes puedes enviar algún meme de perretes o gatos, pero vigila de no pasarte y saturarle la bandeja de entrada.
Además, dar guijarros no debe ser la única forma de comunicación con la persona que nos gusta. Aunque puede servir como un puente para iniciar conversaciones más profundas, es importante no depender únicamente de estos pequeños gestos para construir una relación. Aunque siempre será una buena manera de romper el hielo.