Sharp Objects —Heridas Abiertas— podría ser una de las series que mejor han retratado en los últimos años Sharp Objects. En los ocho capítulos de la primera temporada que están disponibles en HBO desde hoy, lunes 9 de julio, podremos ver como una joven reportera, Camille Preaker —reencarnada por la actriz Amy Adams—, regresa a su ciudad natal, donde se verá obligada a enfrentarse a su pasado. Mientras investiga el asesinato de dos chicas, sus fantasmas familiares la perseguirán provocando que, a veces, se autolesione a base de cortarse en la piel.
Todo este entramado de particularidades hace que Camille sea un personaje complejo. Así lo ha expresado a El País la propia Adams al asegurar que es el trabajo más duro que ha hecho nunca. ¿La razón? No es nada fácil ponerse en la piel de una persona a la que Adams describe como una heroína nada heroica que está llena de complejos y defectos, que ha sido un blanco para el dolor en múltiples ocasiones y que es una alcohólica cuyos ánimos para cuidarse a sí misma se han agotado. "No fue nada fácil vivir en este violento mundo de mujeres. Una violencia no necesariamente física sino emocional. Pero tampoco lo es el día a día rodeados de noticias a cual más sombrías", dijo la actriz al mismo rotativo.
Se trata de un sufrimiento que ha estado dispuesta a protagonizar porque es una de las cabecillas del #MeToo, el movimiento que sacó a la luz las injusticias que hombres en posiciones de poder perpetraron contra un incontable número de mujeres de Hollywood. "No me interesan las historias políticas. Pero Heridas Abiertas habla del dolor de las mujeres. Me gustan las historias no tradicionales, que nos muestran como los seres humanos que somos y no como un estereotipo", ha dicho a El País dejando claro que en esta serie encontraremos varios paralelismos con temas candentes del momento.
Por si el argumento de la serie no fuera suficiente prometedor, las manos que la han hecho posible hacen que las expectativas suban como la espuma. Ha sido escrita por el autor del guión de la película Gone Girl, Gillian Flynn, y tiene como directores a Martin Noxon y Jean-Marc Vallée, director de Big Little Lies, la serie que retrata la explosiva historia de tres mujeres cuyas vidas también se ven sacudidas por un asesinato. Esperemos que Heridas Abiertas supere los brutales giros de guión que nos ha regalado las dos temporadas de Big Little Lies y lleguemos a comprender, en mayor medida, como es ser mujer en un universo plagado de dolor.