Cuando ‘Emily en París’ se estrenó en 2020, teníamos claro que Sylvie representaba todo lo opuesto a Emily. Mientras que Emily tenía el entusiamo de una chica estadounidense que acaba de aterrizar en Europa, Sylvie, interpretada por Philippine Leroy-Beaulieu, era la típica jefa amargada dispuesta a hacerte la vida imposible. Francesa, fría y fumadora compulsiva, nunca le vimos una sonrisa genuina.
Además, mientras veíamos cómo Emily llevaba modelitos coloridos y ‘kitsch’, Sylvie, en cambio, tenía la elegancia parisina impregnada en cada combinación de armario. La jefa francesa de la empresa de publicidad era la antagonista de la alegre Emily.
Pero en estas cuatro temporadas ha ocurrido algo que no esperábamos. Sylvie ha ido evolucionando hasta convertirse en la verdadera estrella de ‘Emily in Paris’ y robarnos el corazón.
Hemos visto su lado más vulnerable —que a priori parecía esconder bajo capas y capas de esa superioridad—, ha vivido romances, ha luchado contra el machismo en la industria de la moda y ha terminado siendo la protectora de Emily.
Ya no es la villana, ahora está en el centro del desenlace narrativo de la serie. Y claro, tampoco nos puede extrañar que ahora algunas revistas como Vogue o Cosmopolitan nos pidan una secuela de Sylvie en París, solo con ella de protagonista.
Enamora a todos los públicos
Quizá no lo veíamos venir. Al principio, la serie claramente apelaba a un público joven, con una trama de una creativa que se hace popular en Instagram y que ve cómo su vida da un giro de 180 grados en todos los sentidos.
Pero, con el tiempo, Sylvie ha ido ganando más atención. Incluso le sorprende a la propia actriz, Philippine Leroy-Beaulieu, quien dice que al principio pensaba que Sylvie solo atraería a una audiencia de mujeres más mayores. Sin embargo, “parece que muchas mujeres han encontrado en Sylvie inspiración en su fortaleza y en cómo expresa lo que piensa”, ha dicho la actriz.
No es la primera vez que un personaje antagonista se come a la actriz principal. Ya pasó con ‘El Diablo viste de Prada’. Todxs recordamos a Miranda Priestly, interpretada por Meryl Streep, pero no tanto a Andrea Sachs (Anne Hathaway).
En esta última temporada, Sylvie da cohesión a toda la trama. Ella es quien pone en jaque una compañía prestigiosa al exponer a un depredador sexual, gestiona su relación abierta y expande su negocio a otro país. Sylvie va más allá del estereotipo de mujer “mala”: se nos presenta como una mujer compleja, vulnerable en un momento, encantadora al siguiente, sin perder su determinación y su ambición.
Emily sigue siendo la protagonista, pero Sylvie nos ofrece lecciones de vida. Una de las frases más míticas de la serie la dice ella: “Tienes el resto de tu vida para ser tan aburrida como quieras. Pero mientras estés aquí, enamórate. Comete errores. Deja un rastro desastroso a tu paso”.