Este es el peligro de las esponjas de maquillaje del que no se habla

Te estás pasando por la cara todo un universo de hongos y bacterias

Los microorganismos están por todos lados. En la pantalla de tu teléfono móvil. En las barras del metro y del autobús urbano. En la mano de tu pareja. Y por supuesto en tu cara. No obstante, estas pequeñas criaturitas proliferan con muchísima más facilidad en determinados lugares que presentan ciertas características claves como son la humedad, la oscuridad y la falta de ventilación. Ahí se acumulan y se desarrollan sin barreras hasta representar en muchos casos una amenaza para tu salud. ¿Qué? ¿Pensando en un váter de mala muerte de un garito recóndito? ¿Quizás en un estropajo de la cocina? Pues sí, pero también la esponja de maquillaje con la que te frotas el rostro todos los días.

Así lo cuenta el doctor Esteban Contreras en un vídeo en su canal de TikTok, quien asegura que efectivamente no hay mucha diferencia en lo que respecta a la presencia de microorganismos entre un estropajo y tu esponja. “Ambas son unas esponjas que absorben líquido y cuando la utilizas por más de tres meses y la dejas humedecer por mucho tiempo los hongos van a crecer en su interior”. Duro pero cierto: estás pasándote por toda la cara un submundo micótico. No tienes más que coger una tijera, cortar tu esponja de maquillaje por la mitad y verás de primera mano la colonia ennegrecida de hongos que habita en ella. Llevan mucho tiempo ahí. Se ha convertido en su hogar.

Son una fuente de bacterias

Y no es solo la opinión de este médico. Como escriben desde El Confidencial, medio que se hace eco de las declaraciones de Contreras, existe un estudio de 2003, llevado a cabo por cinco investigadoras italianas de la Universidad de Ferrara y publicado en la revista especializada en dermatología European Journal of Dermatology, que descubrió cómo las esponjas y las brochas de maquillaje funcionan como “reservorios y vehículos de transmisión de especies bacterianas potencialmente patógenas”. ¿O creías que las bacterias se quedarían fuera del festín? En concreto, son la Staphylococcus epidermis, la Staphylococcus aureus y la Escherichia coli las más comunes en ellas.

En este sentido, y para que te protejas de las consecuencias de estos patógenos sobre tu piel, entre las que se destaca la aparición de granitos indeseados en ella, lxs expertxs recomiendan lo siguiente: cambiarlas cada muy poquito tiempo, no compartirlas con nadie, lavarlas a diario si es posible, no volverlas a usar si no se han secado completamente, promover ese secamiento exponiéndolas a la luz solar y, claro está, tirarlas si presentan manchas negras o mal olor. Y que tengan una calidad decente. Al fin y al cabo, de poco sirve embellecerte a corto plazo, para ir a la universidad o a la oficina, si estás jodiéndote la piel a largo plazo. No se lo pongas tan fácil a los microorganismos.