Esta es la carrera con menos salidas de España

Y cada vez la cursa más gente

De las sociedades humanistas a las sociedades técnicas. A diferencia de lo que ocurría varios siglos atrás, cuando las humanidades jugaban un papel clave en la configuración del mundo, hoy día carreras como la de Historia, la de Literatura o la de Filología están sumidas en una crisis muy profunda. Como afirman desde Xataka, “las carreras humanísticas han registrado una caída brutal del número de alumnos de entre el 30% y el 50%”, buena parte de los cuales se han marchado a carreras más científicas o técnicas. Pero lo curioso es que en España no se está dando esta nueva tendencia mundial. Aquí la gente sigue matriculándose en la carrera con menos salidas: filosofía.

Incluso más que antes: la cifra de alumnos de filosofía ha aumentado en más de 2.000. Es como si en este país viviéramos una realidad paralela al resto del planeta. Y, aunque en cierto sentido es hermoso y loable que tanta gente anteponga el ansia de conocimiento sobre las oportunidades laborales, no es menos cierto que estas son tan escasas que bien valdría pensárselo dos veces. No en vano, y según este mismo medio, “menos de uno de cada cinco alumnos que se ha graduado en los últimos cinco años en esta carrera ha encontrado un trabajo relacionado con sus estudios”. El resto anda en otras movidas. Algunas cualificadas. Otras no cualificadas. Y otrxs en el paro.

Grados con más gente arrepentida

Y esto no pilla desprevenidx. No es ninguna sorpresa. Lo que quizá sí lo haga es el hecho de que, pese a estos números, pese a la malísima expectativa laboral de quienes estudian filosofía en España, no se encuentran entre lxs principales universitarixs arrepentidxs de su elección de carrera. “Las que más son Periodismo (87%), Sociología (72%), Comunicación (64%) y Magisterio (61%)”, seguidas de otras como Turismo, Documentación o Comunicación Audiovisual. Pero quienes cursaron filosofía no echan la vista atrás con pesar. Están felices de haberle dedicado su tiempo y su esfuerzo. Quizás sea precisamente el estudio filosófico lo que les permita vivir con más alegría.

En cualquier caso, quienes entienden de las fluctuaciones del mercado laboral y de la evolución de las empresas dicen que la cosa puede dar un giro pronto. Y no en el sentido de que la gente deje de estudiar filosofía, no, eso parece ser imposible en nuestro país, sino en el sentido de que filosofía abra muchas más puertas laborales que ahora. “Empresas como Google, IBM o Microsoft llevan varios años contratando decenas de graduados en Filosofía para que les ayuden a resolver problemas éticos y morales que plantean determinados avances tecnológicos” como la inteligencia artificial. Tal vez el futuro recompense a quienes se mantuvieron fieles a su amor a esta disciplina.