¿Por qué los masajes son tan increíbles para tu salud?

Disminuyen las sensaciones de dolor y reducen los niveles de la hormona del estrés en el organismo

Puede que estés leyendo este artículo camino de la universidad en el metro. O en el descanso del trabajo mientras te comes un tupper de ensalada de pasta fresquita. O quizás tumbado en el sofá viendo oootro episodio más. Da igual: si ahora mismo unx masajista profesional quisiera darte un masaje for free, lo abandonarías todo. Porque te encantan. ¿Y a quién no? Incluso si te lo da alguien no profesional. Son extremadamente placenteros. Pero hay más: también son increíbles para tu salud por diferentes motivos.

Reducen el dolor

En primer lugar, y como indica en una publicación para The Conversation el doctor en neurociencia Lorenzo Justo, de la Universidad de Vigo, los masajes reducen tus niveles de dolor. "Esto se debe a que el estímulo táctil y el incremento de temperatura generados por la acción masajeadora inhiben la entrada de información vinculada a la sensación de dolor". Son como escudos protectores que alivian tu cuerpo y eso puede ser especialmente deseable en circunstancias jodidas. Como cuando tienes una regla dolorosa.

En segundo lugar, incrementan el flujo sanguíneo debido a tres mecanismos diferentes: "el bombeo por compresión y descompresión de los tejidos, la vasodilatación provocada por el sistema nervioso autónomo y la liberación de sustancias químicas". Esto te beneficia porque optimiza el aporte de nutrientes a los diferentes rincones del cuerpo y promueve la eliminación de los desechos generados. En cualquier caso, advierte el propio Justo, estos efectos sobre el flujo sanguíneo no están 100% confirmados. Falta más investigación.

Relajan los músculos

En tercer lugar, y aunque en este asunto también queda mucho por explorar, parece que los masajes tienen la capacidad de relajar los músculos, lo que en palabras de este experto "se ha asociado a una disminución de la excitabilidad de las neuronas que los controlan" y, además, a la respuesta psicológica, que disminuye los niveles de cortisol en el organismo y por tanto de estrés subjetivo. También se han observado cambios en los marcadores de daño muscular e inflamación, pero según Justo parecen ser moderados.

En resumen, los masajes pueden proporcionarte algunos beneficios, entre los cuales el más destacado es la disminución del dolor. Tal y como lo describe Justo en ese mismo artículo, "metafóricamente, podríamos decir que [los masajes] son el paracetamol de los fisioterapeutas por sus propiedades analgésicas". Ala: ya tienes excusa la próxima vez que quieras que tu pareja te dé un masaje antes de dormir o mientras veis alguna película. Eso sí, la otra persona también puede usarla y te resultará difícil negarte. Es por salud...