Los tipos de bulos más extendidos en nutrición

Es fundamental conocerlos y estar atentx para no comerte ninguno

Internet es una fuente de información prácticamente ilimitada. Pero no solo de buena información: también, y mucho más de lo que piensas, de desinformación y bulos. En el ámbito de la alimentación, dice Jose Miguel Soriano del Castillo, catedrático de Nutrición y Bromatología del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universitat de València, en una publicación para The Conversation, existen hasta seis tipos de bulos particularmente extendidos y afianzados, lo que supone una amenaza para la salud de las personas, muchas de las cuales interiorizan estas falsas informaciones y las aplican en sus dietas. Es fundamental que los conozcas, los identifiques y los combatas.

En primer lugar, asegura, están los titulares engañosos, “títulos, subtítulos o imágenes de los medios de comunicación [que] no se atienen al contenido”. De ahí la importancia de no quedarse solo en la superficie y dedicarle unos minutos al cuerpo del artículo. Vivir de leer titulares y poco más es una mala estrategia para estar bien informadx. En segundo lugar están los contextos falsos. Nuevamente, el contenido del post es bueno, probablemente derivado de investigaciones científicas, pero viene acompañado de información bytheface que tira por tierra cualquier credibilidad. Otro tipo de bulo encubierto más que exige capacidad crítica y contraste de la información. No des nada por hecho. Analízalo.

Sobre todo porque en ocasiones la mala información proviene directamente del contenido central del artículo. Como escribe Soriano, ocurre “cuando la información o imágenes genuinas se manipulan para engañar”. La mayoría de veces la manipulación no proviene del periodista o el bloguerx de turno, sino de internautas anónimos. No obstante, la responsabilidad de lxs creadorxs de contenido es precisamente verificar la veracidad de la información. Y no siempre la cumplen. Más te vale estar atentx. A veces, y el experto lo considera un tipo de bulo especial, el contenido manipulado es contenido orientado a arruinar la reputación de alguien o algo. Como la persecución de los hidratos de carbono.

Esto nos lleva directamente al quinto tipo de bulo sobre nutrición: el contenido fabricado con mala fe. Según Soriano, esta “información es 100% falsa y se crea expresamente para engañar y hacer daño”. Hay personas ahí afuera, como decía el mayordomo de Batman, que solo quieren ver arder el mundo. Sin más. Por último, está la mala información de coña. “Se utiliza sin ninguna intención de causar daño, pero tiene potencial para engañar si la fuente de donde ha salido no es conocida por el público en general”. Rollo El Mundo Today, que entre broma y broma, y si te pilla despistadx, puede hacer que termines pensando que cenar solo un yogur es la principal causa de mortalidad.