Hemos hablado antes de cómo los roles de género asociados a un ideal de hombre fuerte e inquebrantable pueden afectar a la salud mental de los chicos, ya que dificulta que puedan hablar y expresar sobre cómo se sienten, y, en consecuencia, les es más difícil recibir ayuda. Pues bien, no solo este ideal de “machote” —en la que actitudes como el cuidado se ven de forma negativa— afecta a la salud mental, sino que ahora hay cada vez más evidencia de que también podría estar impactando en la salud cardiovascular de los hombres.
Una nueva investigación de la prestigiosa Universidad de Chicago ha encontrado que el ideal del “machote” puede empeorar la salud cardiovascular de los hombres desde la adolescencia y la adultez temprana.
¿Qué dicen los resultados?
Pues bien, los hombres que desde la adolescencia (entre 12 y 18 años) toman conductas más alineadas con “los estereotipos de género masculinos” tienen menos probabilidades de comunicar en su edad adulta (entre los 32 y 42 años) a su círculo más cercano los diagnósticos de factores de riesgo cardiovascular o los tratamientos que reciben para los mismos.
Esto puede llevar a que no se les diagnostiquen problemas de salud a tiempo, ya que no se atreven a contarle a los demás lo que les pasa o a ir al médico cuando deberían. Como resultado, sus problemas de salud pueden ser “invisibles” para ellos mismos y para las personas que los rodean.
Menos diagnósticos
Como consecuencia, los chicos que muestran más características de lo que se considera una ”masculinidad tradicional” (como ser muy independientes, no mostrar vulnerabilidad o tratar de ser siempre fuertes) tenían menos diagnósticos de enfermedades como la hipertensión (presión alta), la diabetes o problemas de colesterol (dislipemia). Pero no porque sean más saludables. Es posible que simplemente no estén compartiendo sus síntomas o buscando ayuda médica por esa idea de que no deben mostrar debilidad. Así que, aunque parezca que no tienen esas enfermedades, podría ser que no se les haya diagnosticado porque no se están revisando lo suficiente o no están comunicando lo que les pasa.
Según datos de la Fundación Española del Corazón que recoge El País, los hombres menores de 50 años tienen más problemas de salud relacionados con el corazón que las mujeres de la misma edad. Esto tiene algo que ver con que, biológicamente, los hombres podrían ser más propensos a sufrir problemas cardíacos antes de los 50, especialmente si los comparamos con las mujeres antes de que lleguen a la menopausia.
Pero, aunque los factores biológicos como los genes o las hormonas puedan influir un poco, no explican por completo por qué los hombres tienen más enfermedades del corazón o mueren más jóvenes que las mujeres. Lxs investigadores creen que hay otros factores, como el estilo de vida o la forma en que los hombres manejan su salud (por ejemplo, no ir tanto al médico o no reconocer sus síntomas), que podrían estar contribuyendo a que tengan más problemas cardíacos y mueran antes.