Por qué deberías intentar pasar el resto de tu vida cerca del mar

Un estudio elaborado por investigadores de la Universidad británica de Exeter asegura que mantenerse cerca de los espacios azules conlleva "un menor riesgo de depresión"

La vida parecía tremendamente sencilla cuando eras pequeño y tu única verdadera preocupación era que tus padres no te mandaran todavía a dormir. Pero luego mutó y aparecieron las decisiones, los problemas, los trabajos, las relaciones y todas esas cosas de adultos que precipitaron que estrés, ansiedad o depresión fuesen sensaciones recurrentes en tu vida. Probaste con los bestsellers de autoayuda, las charlas TED que prometían cambiarlo todo e incluso la ansiedad. Pero olvidaste algo esencial: regresar a la naturaleza. O más concretamente al agua.

Porque según una investigación realizada por científicos en Hong Kong y publicada en la revista especializada en salud Health & Place, mantenerse cerca de los espacios azules como playas, puertos, lagos o ríos está estrechamente relacionado con una mejor salud física, mental y emocional. Por esta razón, el investigador médico de la Universidad de Exeter Jo Garrett, coautor del estudio, ha reivindicado la necesidad de acudir a los espacios azules naturales, ya que "son un importante recurso de salud pública”.

De esta manera, confirmamos que esas buenas sensaciones, ese aumento de la serenidad, que hemos experimentado toda nuestra vida cuando nos acercábamos al mar o mirábamos embobados el discurrir de un río no era algo circunstancial. Teníamos ese instinto, pero no nos habríamos atrevido a decir que conllevaba “un menor riesgo de depresión”. Ahora sí. Los investigadores de la Universidad de Exeter, tras encuestar a 1.000 personas en Hong Kong acerca del tiempo que pasan cerca de estos espacios y sobre su bienestar emocional, lo han corroborado.

Aunque no es el primer estudio que aborda este tema. Otro, publicado también en la Health & Place, ya desveló en 2012 que “las personas que viven cerca de la costa tienden a tener mejor salud que las que viven en el interior”, independientemente de otros factores. Por eso tantas personas nacidas en la costa reportan esa tremenda nostalgia por el mar cuando tienen que mudarse al interior. Los beneficios del azul desaparecen de golpe. Así que quizá deberíamos priorizar más el agua a la hora de elegir dónde queremos pasar nuestras vidas.