Cómo sobrevivir soltero en un mundo hecho para parejas

Hipotecas imposibles. Gastos bestiales. Y ningún incentivo fiscal

Hay nuevo récord en España: nunca ha habido tantas personas solteras como en estos momentos de la historia. Y despierta preguntas muy importantes. ¿Estamos siendo víctimas de un sistema individualista que nos desune cada vez más? ¿O simplemente estamos abandonando la monogamia tradicional gracias al derrumbe de los prejuicios morales acerca de la soltería? Quién sabe. Quizás la realidad sea una mezcla de ambas circunstancias. Lo que sí está claro, lo que nadie puede dudar, es que la soltería no es para gente humilde: el modelo predominante sigue siendo la familia como equipo económico. Una persona sola a duras penas puede sobrevivir en este sistema para parejas.

Porque los alquileres son una barbaridad. Y el precio de una casa. Y la nómina que tienes que tener para que te concedan una hipoteca sin una persona más aportando sus ingresos. En palabras de la periodista Inma Benedito, “comprar un piso, hacer la compra semanal, cenar en un restaurante... la lista de situaciones cotidianas que se complican simplemente por el hecho de afrontarlas sola o solo es larga”. Pagar el veterinario del perro. Reservar un hotel teniendo en cuenta que las habitaciones que salen mejor de precio son las dobles. Comprar comida en el súper sabiendo que vas a tener que hartarte esta semana de ese producto si no quieres que se ponga malo. Es una constante.

Todo se construye en base a la pareja

Como explica Inés Ferreirós, coordinadora del laboratorio de políticas de la Fundación Alternativas, en el artículo de Benedito, “el sistema no se está adaptando a la nueva realidad. La destrucción del modelo tradicional de hogar no ha hecho que la sociedad se deje de estructurar en base a esa idea de pareja. Existe una disociación entre las condiciones materiales de vida”. Tu cuenta bancaria es la cuenta bancaria media de una persona en España, pero el mundo sigue esperando que tengas unx aliadx a tu lado para complementarla con la suya. Cobras 1.500 euros y una hipoteca te sale por 1.000 euros. Es prácticamente imposible. Tendrías que renunciar a disfrutar de tu vida.

Y la inflación tan bestia que hemos vivido en los últimos tiempos no ha ayudado. El día a día se ha vuelto mucho más caro. Sobre todo porque los sueldos no han crecido en consonancia. Además, y como apunta Benedito, tampoco ha habido movimientos en las políticas fiscales hacia un mayor apoyo a la soltería. “No existen los beneficios fiscales para personas solteras”. No interesa. Lo que interesa es que tengas pareja, tengas bebés y se conviertan en nuevos productores/consumidores del sistema. Por eso los matrimonios tienen las desgravaciones del IRPF más jugositas. Es triste, pero de momento el mundo te empuja hacia el emparejamiento estable.