Hatha yoga. Yoga kundalini. Yoga bikram. Ashtanga yoga. Yoga vinyasa. Yin yoga. Yoga restaurativo. Son solo algunas de las muchas variedades de yoga que existen en la actualidad. Algunas fueron desarrolladas por grandes maestrxs en el pasado lejano. Otras tienen un origen moderno y apenas han comenzado su historia. En cualquier caso todas proporcionan, gracias a ciertos elementos comunes y otros no tan comunes, una serie de beneficios específicos para la salud de tu organismo y de tu mente. El Bhakti yoga, por ejemplo, es una modalidad que, según cuentan desde Vitónica, resulta especialmente provechosa a la hora de disminuir los niveles de estrés.
También conocido como el yoga de la devoción, es una variedad en la que “no predominan las técnicas de respiración ni de meditación, como así tampoco se desarrollan posturas o movimientos físicos concretos, sino que se llevan a cabo una amplia variedad de prácticas y rituales de contemplación”. O dicho de otra manera: es un yoga mucho menos físico que otras modalidades más populares, más centrado en el desarrollo mental y espiritual. Precisamente por eso se le considera el tipo de yoga que mejor favorece el autoconocimiento, la conexión con unx mismx y el incremento de la relajación. Es la variante que necesitas si pasas tus días con el cortisol por las nubes.
Entre esos rituales están las oraciones hacia lo divino o hacia otras personas, el pronunciamiento de mantras y mudras, la realización de todo tipo de gestos simbólicos con las manos y con el resto del cuerpo y los cantos. Es quizás una variante de yoga que recuerda más a los rituales de otras religiones tradicionales que al yoga en sí. Sin embargo, no está orientado a una deidad, sino a ti mismx. Es una gran diferencia. El Bhakti yoga te permite así ubicarte, mejorar tu estado de ánimo y optimizar tu capacidad de concentración. En unos tiempos tan frenéticos, la habilidad de permanecer atento a lo que te rodea es un regalo. Pero tienes que trabajar el Bhakti para conseguirlo.
Además, esta práctica también persigue un último objetivo muy importante: el cultivo del autoamor. Como explican en el citado medio, “el término Bhakti viene de la raíz sánscrita ‘bhaj’, que significa ‘participar en, compartir en, formar parte de’, por lo que se dice que una palabra que define la práctica de Bhakti yoga es el amor”. En especial el amor por unx mismx, ese sin el cual estás perdidx en la vida, ese sin el que no puedes protegerte de las malas personas, ese sin el cual no puedes liberar todo tu potencial... No, no sabes si la práctica de este tipo de yoga es para ti y te proporcionará los beneficios que le proporciona a mucha gente, pero merece la pena intentarlo.