Así podría arruinar tu vida una de las sectas más peligrosas del mundo

El colectivo llamado 'Gnosis' es el que está detrás de secuestro como el la española Patricia Aguilar

El 7 de enero de 2017, Patricia Aguilar, una joven ilicitana de 18 años abandonaba la casa de sus padres para unirse a la secta gnóstica de Felix Steven Marique en Perú. Este sujeto, un gurú de 34 años, reclutaba adolescentes a través de Internet para convertirlas en sus esposas y repoblar el mundo. Un mundo que, según él y Gnosis –la secta a la que pertenece–, estaba en riesgo de sufrir un apocalipsis. La secta Gnosis fue fundada en el año 1954 por un curandero y escritor de libros sobre esoterismo. Actualmente está considerada una de la sectas más peligrosas del mundo.

El fundador de esta secta, llamado Víctor Manual Gómez, declaró que él era una encarnación de Samael un ángel caído de la Biblia y tenía la función de expandir su palabra por todo el mundo. Los miembros de Gnosis defienden seguir una doctrina que busca la autorrealización del ser y el desarrollo de todas las aptitudes humanas a través de la evolución de la mente, el alma y el cuerpo. Y no solo termina ahí, la secta se considera con la capacidad de regenerar a la humanidad y aportar lo que, según ellos, son los pilares del conocimiento: la ciencia, el arte, la filosofía y lo místico.

La secta Gnosis se originó en Colombia y empezó a expandirse por muchos lugares, entre ellos Perú y España. El secuestrador de Patricia Aguilar utilizó su vínculo con la secta para seducir a la joven en un momento de vulnerabilidad. Antes de abandonar su hogar, Patricia había perdido a un familiar. Una mañana se acercó a un blog de esoterismo para contar un sueño que había tenido: fue a través de ahí como Steven Manrique contactó con ella. Le predicó el mensaje de la secta que dice que es posible encontrar la salvación a través del conocimiento introspectivo de lo divino. Eso requiere olvidar y dejar todo atrás, una especie de redención personal.

Hace ya algunos meses que Patricia Aguilar volvió a España. Su padre jamás dejó de buscarla. Su entrega lo llevó no solo a rescatar a su hija de las manos de Félix Steven Manrique sino también a salvar a otras dos mujeres y llevar a este hombre ante la justicia. Los representantes de la secta Gnosis explicaron que, aunque Manrique sí había estado vinculado a su colectivo, había sido expulsado prácticamente desde sus inicios por su carácter mitómano. La creencia es capaz de mover montañas y existen vertientes que se aprovechan de esa fe para un objetivo personal, de ahí el peligro de sectas en las que se te invita a alejarte de tu entorno para conseguir la iluminación. 

Algo de lo que, como otros muchos gurús, fue aprovechado por Manrique para abusar económica y sexualmente de Patricia Aguilar y muchas más mujeres que, por desgracia, no podremos ni siquiera llegar a conocer.