Por qué hay tanta gente que se ha vuelto adicta al bálsamo del tigre

Te da la sensación de que lo cura todo, desde resfriados hasta contracturas. ¿Estás locx? Tranquilx: no

Tienes una contractura, bálsamo del tigre. Te duelen las lumbares, bálsamo del tigre. Tienes congestión, bálsamo del tigre. Tienes migraña, bálsamo del tigre. Sí, este producto que sirve para todo es cada vez más popular. Tanto, que se ha convertido en una estrella en Amazon: el más vendido en la categoría de cuidados y acumulando miles de reviews dándole entre 4 y 5 estrellas, alabando un producto milagroso capaz de solucionar cualquier dolencia.

Pero, ¿qué es este ungüento? “Cuenta la historia que el bálsamo de tigre lo inventó hace 150 años Aw Chu Kin, un herborista birmano que había trabajado durante años para el emperador chino. Tras abandonar la corte y regresar a Rangún, se puso a trabajar en su herboristería para desarrollar un mejunje que sirviera para remediar todo tipo de dolores corporales. Y así, a base de combinar aceites esenciales y otras sustancias naturales, dio con una combinación que parecía curarlo casi todo”, explica El Mundo, recuperando la leyenda en torno a su nacimiento. Parece un cuento chino, pero todo apunta a que es cierto, porque los comercializadores del producto, y que lograron construir emporio en torno a él y que a día de hoy todavía existe, exportando directamente a más de 100 países, eran los hijos de Aw, uno de los cuales se llama Aw Boon Haw, que en birmano significa “Tigre Amable”: y de ahí viene el nombre del producto.

Sobre sus efectos, lo que esta pomada hace es mezclar sustancias que dan calor en la zona donde se aplica con antinflamatorios y ungüentos frescos que abran las vías respiratorias. Y así, alivia todas las aflicciones posibles. Gracias a esta combinación sirve para “contracturas, los calambres, las sobrecargas musculares, los reumatismos, la artritis, los dolores cervicales y lumbares, la congestión nasal, la tos, las dificultades para respirar...”, añade el artículo. Vamos, no estás locx si sientes que el bálsamo te lo puede curar literalmente todo.

"No creo en los remedios milagrosos, pero este bálsamo ha logrado darme una mejor calidad de vida. Cierto es que no cura, pero vivir con menos dolor es todo un regalo. Recomiendo el bálsamo a todas las personas que tengan dolencias", asegura una compradora en Amazon. “¿¿¿¿Porros???? No, gracias. Mi única adicción es untarme bálsamo del tigre en los hombros porque NO puedo más, de verdad. Necesito una almohada nueva urgentemente”, añadía otra en Twitter.

Estas críticas y alabanzas hacia el bálsamo se repiten en todas las redes, existe una devoción casi de secta en torno al producto. Incluso si buscas en Facebook es fácil encontrar grupos de fans del bálsamo donde usuarios hablan de él como si fuera su estrella favorita. O en YouTube, donde lo equiparan a una experiencia casi mística. Sus propiedades curativas están haciendo la vida más fácil a mucha gente, es innegable. Y por eso, sumado al efecto alud de los cada vez más numerosos fans que celebran que haya llegado a su vida, seguro que te has topado con amigos y familiares que te intentan convencer con la misma convicción de un reclutador de estafas piramidales. Por suerte, el máximo riesgo que puedes correr uniéndote a ellos es volverte un friki digital del bálsamo. Sus ingredientes son naturales y bastante comunes, no hay motivo para rayarse.