La técnica para llegar al orgasmo solo con la mente existe y puedes aprenderla

La sensibilidad empieza en la cabeza, si no te conectas con ella, todo lo demás fracasará

Hemos aprendido a estimular el clítoris, los pezones, la piel, el glande. Nos sabemos todas las posturas, las mejores técnicas de felación, penetración y masaje para convertir a tu pareja en el ser más iluminado del mundo y a ti en una auténtica arma infalible. Pero nos estamos dejando algo: el cerebro. Allí es donde empieza todo, desde las fantasías hasta la comunicación, pasando por los momentos de concentración previos al orgasmo que te ayudarán a llevarlo siempre un poco más allá.

En el pasado ya os hemos hablado del sexo tántrico, pero hoy vamos a centrarnos en un tipo de orgasmo poco habitual: el mental. También conocido como neurosexo, se trata de una práctica que no conlleva contacto físico. La práctica "se concentra en la respiración, en cómo la hemos hablado del sexo tántrico se crea y se expande en el estómago", explica la hemos hablado del sexo tántrico. La idea es respirar profundamente y concentrar la energía en la zona pélvica para empezar luego a mover las caderas arriba y abajo al ritmo que inhalas y exaltas. La hiperventilación te puede llevar al más allá. Tienes que dejar que el cuerpo fluya y empezarás a sentir un hormigueo y un calor muy especial, como el que ya conoces. Al final, si consigues que la mente se evada, puedes llegar a correrte sin siquiera haberte quitado la ropa.

La idea no es nueva, sino que viene de los años 80 cuando la epidemia del SIDA parecía no tener freno. La técnica es de la coach neoyorkina Barbara Carrellas que, basándose en el descubrimiento de sus predecesores William Masters y Virginia Johnson sobre la relación entre el placer y el cerebro, creó un método para poder tener orgasmos sin manos. Incluso en sus talleres, con la ropa puesta, sus alumnos pueden llegar a correrse.

 

El orgasmo mental no se consigue de la noche a la mañana. Como explicaba la misma Carrellas hace unos años a El Confidencial, todo lo que tiene que ver con estimular el cuerpo solo con la mente requiere mucha práctica y concentración. Tampoco es para todo el mundo, pero si lo quieres probar, puede ser una forma alternativa de explorar tu sexualidad. En cualquier caso, aunque no busques convertirte en un ser de luz que flota por debajo del pantalón, todo lo que tenga que ver con la conciencia de tu cuerpo te ayudará a mejorar todas tus relaciones sexuales.

¿Alguna vez te has parado a analizar cómo bombea la sangre cuando tienes sexo? ¿O cómo se calienta tu piel? ¿O cómo se contraen tus músculos y tus órganos internos? De eso se trata, de ver el potencial que tiene el cerebro para empezar a valorar lo que ya tenemos frente a nosotrxs. Si quieres explorar más, los vídeos de los talleres de Carrellas están en YouTube y también tiene el libro Ectasy Is Necessary: A Practical Guide "El éxtasis es necesario: una guía práctica". La idea, como en el tantra, es aprender a controlarse. Y como dice ella: "cuando se está preparadx, hay que dejarse llevar".