Esto es lo que deberías hacer para mantener una relación de amistad durante años

No solo hará más fuerte vuestra relación: también os mantendrá cerebralmente más sanxs

Las amistades se dan por sentado aproximadamente durante los 25 primeros años de vida. Tus amigxs simplemente están ahí. No se van a ningún lado. Os unís casi magnéticamente sin mucha dificultad. De ahí en adelante, sin embargo, los devenires de la vida adulta van planteando retos a las relaciones de amistad. Es entonces cuando muchas perecen. Se quedan en el camino. Otras, por el contrario, sobreviven a todas las tormentas e incluso se vuelven más fuertes. ¿Y quieres saber por qué? Pues por un ingrediente clave: la escucha mutua.

Por qué es tan importante escuchar

Esa es la teoría de la experta en relaciones Randi Levin. En una publicación para el medio digital BestLife, señala que "el rasgo principal que enciende y sostiene las amistades es la capacidad de escucharse unos a otros". De mostrar verdadero interés en lo que tus amigxs necesitan expresar. No el hecho de que salgas de discoteca con ellxs. No lo mucho que les haces reír. Ni siquiera todos los favores que les has hecho a lo largo de los años o incluso de las décadas. No. Todo eso es secundario. Lo que importa es tu atención activa.

Algo que, según la propia Levin, viene provocado por el trascendente papel de la escucha mutua en la conexión interpersonal. En sus propias palabras, "nada es más valioso en el mundo actual que la verdadera conexión: las redes sociales han diluido la definición de amistad de la sociedad, por lo que es aún más importante seleccionar y cultivar amistades sólidas y continuas que agreguen sustancia genuina, significado y conversión inteligente a tu vida". Nunca antes la escucha mutua había sido tan determinante en la calidad de las amistades. 

No juzgues, solo presta atención

Esta, a su vez, debe construirse en torno a una sustancia esencial: la falta de juicio. Porque tus amigxs no quieren que andes criticando y mirando con lupa cada mínima cosa que dicen. No quieren que actúes como una fuerza censora. Sí, tienes tu opinión, y en muchos casos te la pedirán, pero la escucha realmente enriquecedora debe basarse en la compresión y la empatía. Si aplicas esto, harás muy feliz a tus colegas. Como subraya la terapeuta Heidi McBain en este mismo medio, "es difícil hallar amigxs que te acepten en lugar de juzgarte".

Pero no solo les hará felices: también más sanxs. Eso es precisamente lo que descubrieron varixs investigadorxs durante un estudio del año 2021. Al parecer, y como apuntan desde BestLife, encontraron "que el acto de rodearnos de amigos que nos escuchan activamente cuando hablamos y nos desahogamos puede ayudar a desarrollar la resiliencia cognitiva", lo que protege frente a las enfermedades como la demencia o el Alzheimer. Por ti, por ellxs y por vuestra relación, presta atención de verdad cuando te cuentan cosas. Es todo lo que cuenta.