Cómo vives las compras navideñas define tu personalidad

La teoría de las metas explica claramente tu amor u odio a ir de tienda en tienda

Una preciosa casa decorada con adornos navideños, una familia sonriendo y mucha comida en la mesa. Esta es la imagen asociada típicamente a las navidades y, sin embargo, están mucho más marcadas por las calles comerciales atestadas, las colas para conseguir el enésimo modelo de smartphone y el despilfarro económico. Un escenario que, para muchas personas, representa una fiesta eufórica de consumismo y diversión, mientras que para otras supone un verdadero infierno en la Tierra. Y, al contrario de lo que puedas pensar, esto no depende demasiado de tus ideas sociales. En realidad, depende de un aspecto clave de tu personalidad.

Como explica el especialista Michael Breazeale en un artículo para The Conversation, "los investigadores de psicología dividen el mundo en dos grupos: aquellos que tienden a enfocarse más en lograr tareas versus aquellos que se enfocan más en hacer conexiones con los demás", una propuesta conocida como teoría de las metas. Son propensiones muy arraigadas en cada persona y tú, como cualquier otra, tienes una clara tendencia hacia una de las dos. Quizás hayas racionalizado a posteriori ideas acerca del consumismo o de la Navidad, pero la realidad es que, en el fondo, estás profundamente condicionado por esa tendencia.

Así, añade Breazeale, "los compradores orientados a tareas suelen centrarse en encontrar lo que necesitan lo más rápido posible y con el menor esfuerzo". Si perteneces a este grupo, detestas las masificaciones y no obtienes la más mínima satisfacción de la dimensión social del consumismo. Buscarás en internet lo que tienes que comprar y listo. Así podrás dedicar todo tu tiempo a disfrutar de la Navidad como te mola: descansando, no invirtiendo una gran cantidad de energía a dar vueltas por los centros comerciales, esquivar seres humanos y frustrarte porque alguien acapara la estantería de la tienda. Una Navidad de desconexión.

Por el contrario, "los compradores con orientación social disfrutan más de la experiencia cuando hay otras personas cerca, incluso si no interactúan directamente". Para ti, en caso de que pertenezcas a esta otra categoría de consumidor, las cosas son mucho mejores cuando estás rodeado. Es como cuando vamos al cine. Algunas personas prefieren estar completamente solas para no ser molestadas lo más mínimo, mientras que otras se maravillan con la experiencia colectiva y prefieren reírse o temer en armonía con los demás que evitarse las molestias de unos frutos secos crujiendo en una boca ajena. Cuestión de personalidades.

Y no solo en relación a la teoría de las metas. Según Breazeale, las navidades, y especialmente las compras, pueden ser una experiencia muy diferente en función de las necesidades de espacio personal. En palabras del especialista, "la presencia de otros compradores en una tienda despierta psicológicamente a las personas en ambos extremos del espectro del espacio personal". Así, algunas personas se emocionan literalmente con el hecho que haya gente cerca e incluso se toquen involuntariamente. Pero para otras es un martirio y sufren estrés en estas situaciones. Lo bueno, gracias a internet, es que hoy tenemos alternativa.