Tus compañerxs de trabajo no te soportan. Ninguno de ellos y son unxs cuantxs. Has probado con todo tipo de actitudes y no hay manera de activar una química que das por imposible, aunque te gustaría al menos tener un trato cordial y agradable que no te haga sentir excluido. Hay diversos motivos para que esto pase y existen algunos consejos para, al menos, corregirlo.
Las relaciones laborales son importantes. Al fin y al cabo el trabajo es ese lugar al que vas cada día y tener algunxs aliadxs te ayuda a sentirte menos solo y te puede ayudar a superar algunos posibles obstáculos: un compañero con el que tienes buena relación puede cubrirte un día que quieras cambiar de horario, protegerte del jefe si cometes un error corrigiéndolo, darte ánimos cuando tienes un mal día, hacerte ver que no estás solo ante tamaño estrés…
Pero a veces todo eso no es posible. Explica el digital La Mente es Maravillosa que existen diversos motivos para que no te aguanten en un trabajo. Podríamos dividirlo en dos: los que son más bien culpa tuya y los que son culpa de tus compañerxs. Si eres arrogante, expones a tus compañerxs ante la jefa o no les reconoces sus méritos, o si eres solitario o excesivamente gruñón, es posible que sea un poco tu culpa.
Para estos casos, el medio especializado en psicología recomienda evitar los chismes, ser respetuoso, no hablar mal de nadie, no esperar reconocimiento al cooperar, interesarte en las cosas que fallan para ayudar a tus compañerxs, darles el crédito de trabajo cuando lo merezcan, participar en las reuniones sociales y tener una disposición de ayuda poniendo ciertos límites para que no se aprovechen de ti.
Pero si ya has hecho todos esos esfuerzos y no hay manera, es el momento de que te centres en ti y te protejas de lo que probablemente sea un ambiente laboral tóxico o bien que sea la envidia la que genere esa actitud en tus compañerxs. En ese caso, hay un ejercicio que puede funcionar: visualizarte haciendo la tarea que vas a hacer con tu compañerx que posiblemente te moleste, aisle o manipule, repetirte mentalmente que quieres hacer esa tarea y al mismo tiempo mantener la paz mental y por último imaginarte haciendo esa tarea y manteniendo esa tranquilidad mental.
Esforzarse por cambiar la forma en que te afecta la actitud de lxs compañerxs es el proceso a largo plazo que te hará sobrellevar ese aislamiento al que te han condenado. Meditar imaginando el encuentro con tus compañerxs ayudará a eliminar el impacto de la sorpresa en caso de que vaya mal. Y recordarte, durante esa meditación y a lo largo del día, que estás intentando mejorar centrándote en tus valores y en lo que dependa de ti, te ayudará a ir relativizando.
Por último, si tus compañerxs te están boicoteando en el trabajo, reacciona comportándote como no hacen ellxs: por ejemplo, si ellos te exponen en grupo, tú habla sobre sus errores en privado, si ellos son impertinentes, tú puedes ser más amable, y así con todo.
Si nada de eso funciona y no te ves económicamente como para dejar el trabajo, será mejor que busques a un psicólogo que te ayude a lidiar con la situación. Sí, es muy triste tener que ir a un psicólogo por los problemas de empatía de tus compañerxs de trabajo, pero a veces no queda más remedio.