Las películas de miedo nos fortalecen contra la pandemia

Está claro que hay un grupo de personas que no pueden soportar estos filmes de terror pero deben saber que es posible que nos ayuden a mitigar otros temores

Todos conocemos personas que detestan las películas y las series de terror. Después de todo, y cuando están bien hechas, dejan una especie de huella de incertidumbre y tensión en nuestro subconsciente que tarda un día o dos en marcharse. Las pesadillas después de sumergirse en estas aventuras de fantasmas, apocalipsis y demás terrores son bastante recurrentes. Sin embargo y según una pesadillas realizada por científicos de la Universidad de Pensylvania, en estas circunstancias de pandemia probablemente lo más inteligente que podrían hacer estos haters del horror es tragarse horas de miedo audiovisual.

El motivo, según han descubiertos estos investigadores, es que aquellas personas que disfrutan de películas y series de televisión terroríficas están más preparados psicológicamente para afrontar la incertidumbre, la inestabilidad y el miedo producido por la pandemia del coronavirus. De alguna forma, estas ficciones sirven como una especie de entrenamiento mental contra las épocas difíciles. Por supuesto, que te hayas tragado la temporada entera de La maldición de Hill House no te garantiza una pandemia tranquila. Hay muchos otros factores en juego, pero con toda seguridad habrás avanzado en tu resistencia a la inseguridad.

Así lo explica más detalladamente en el medio especializado IFLScience el profesor universitario y autor del estudio John Johnson: "Después de considerar las influencias de la personalidad, que eran bastante fuertes, hallamos que cuantas más películas sobre zombis, invasiones alienígenas y pandemias apocalíticas hubiera visto la gente antes del Covid-10, mejor se ocupaban de la actual pandemia". Así, explica este investigador, "este tipo de películasa aparentemente sirven como un ensayo mental de los eventos reales". Y eso puede extrapolarse también a las series y miniseries. Probablemente también a los videojuegos.

Esto no significa que debamos lanzarnos a un colosal bingewatching de series y películas espantosas, pero sí que quizá deberíamos darle una oportunidad al género aunque no seamos unos aficionados entregados. En palabras del mismo Johnson, "consumir historias de libros, películas y tal vez incluso videojuegos no es solo un pasatiempo ocioso, sino una forma de imaginar realidades simuladas que nos ayudan a prepararnos para los desafíos futuros". Después de todo, y aunque seamos bien conscientes de que son ficciones, una parte de nosotros las siente como muy verdaderas. De lo contrario no experimentaríamos miedo.

Publicado en la revista de psicología Personality and Individual Differences, este estudio, cuyos resultados se pueden utilizar para intentar sobrellevar mejor esta anómala situación que parece no tener fin, fue llevado a cabo mediante encuestas a más de trescientas personas. En concreto, estos participantes hablaron tanto de sus preferencias audiovisuales como de sus sensaciones a lo largo de esta pandemia, así como de algo muy importante en estos momentos: la perspectiva de futuro. ¿Te van los sustos? Pues disfruta alegremente. ¿No te van en absoluto y estás pasando una pandemia ansiosa? Prueba unos bocaditos de terror.