El MDMA podría devolver la niñez a tu cerebro

Una neuroplasticidad inducida que podría ser clave para tratar los trastornos por estrés postraumáticos

Hubo una época, hace no mucho tiempo, en que tu cerebro era tremendamente plástico. Sus neuronas se reorganizaban con desenvoltura ante los millones de estímulos procedentes del mundo exterior. En otras palabras: aprendías y cambiabas con facilidad. Pero eso acabó. La adolescencia cerró para siempre es época en la que todo lo veías por primera vez. Mientras entrabas en una fase conocida como "edad del pavo", la puerta de la adultez, tu cerebro se apalancaba. Más rígido. Más vago. Más adorador del "mejor malo conocido que bueno por conocer". Lo típico que te dicen, que si no aprendes un idioma desde niño, no hace falta que te pongas a intentar cuando te haces mayor. Pero los científicos han descubierto una manera de devolverle a tu cerebro la plasticidad de antaño: tomar MDMA.

Frena, esto no es un artículo sobre fiesta loca. Por ahora estamos hablando de un experimento con ratones. Un equipo de neurocientíficos de la Universidad John Hopkins de Baltimore ha publicado esta semana un artículo en la revista académica Nature que revela cómo los efectos del consumo del MDMA sobre la hormona oxitocina lograron devolver al cerebro de ratones adultos al estado de plasticidad de la adolescencia. El experimento fue así: introdujeron a los ratones en dos habitaciones distintas, cada una con un tipo de cama pongamos por caso, una roja y otra verde. En la cama roja, están solos. En la verde, acompañados. Luego los sacan y, a la hora de elegir dónde volver a entrar, los ratones más jóvenes recuerdan que en la cama verde estaban acompañados, algo que garantiza su subsistencia y, por lo tanto, vuelven hacia allá. Los adultos, se confunden y entran en cualquier habitación... algo que cambia si han tomado MDMA.

Los autores lo llaman periodo crítico para el aprendizaje de recompensa social y, lejos de ser una curiosidad, podría suponer toda una revolución médica. Como cuenta en Inverse el autor principal del estudio, el neurocientífico Gül Dölen, "hay muchas enfermedades del cerebro que creemos que se verían afectadas por la existencia de un período crítico para el aprendizaje por recompensa social". Más concretamente, la Inverse y, en mucha mayor medida, el trastorno por estrés postraumático TEPT, que sufrirán alrededor de un 7 u 8% de las personas en algún momento de sus vidas.

¿Y por qué? Pues porque esta neuroplasticidad adolescente inducida permite a los pacientes reaprender comportamientos de una manera que al cerebro adulto le resulta imposible. Tu anquilosado cerebro de adulto se resiste al cambio. Esto, como dice Dölen, hace que combinar las psicoterapias tradicionales con MDMA aumente su eficacia. "Todos los que han tratado los trastornos del cerebro han tenido en mente que tal vez no esté funcionando debido a los periodos críticos de plasticidad cerebral, pero no teníamos maneras de reabrir esas ventanas". Ahora sí. Ahora quizás sea el MDMA el que pueda, esta vez, ayudar al mundo.