El estado de los océanos nos afecta a todxs. Quizás no lo sientas así estando todo el día en tierra firme, ajenx a su acidez, a su temperatura, a sus corrientes sumergidas y a las criaturas que habitan en ellos, pero la realidad es que el planeta representa un todo en el que cada parte se encuentra inevitablemente conectada a las demás. Y si los océanos sufren el resto del planeta sufre. Incluidos los seres humanos. Pero esto ya lo sabíamos. El problema es, según un nuevo informe del European Marine Board, entidad no gubernamental dedicada a la investigación marina, que cada país trata a la porción de océano que le corresponde como quiere. No hay una acción conjunta sólida para protegerlo.
”En la actualidad, el agua dulce, el clima, la biodiversidad, la salud y el bienestar humanos y el océano son gestionados por diferentes autoridades que pueden centrarse en distintas cuestiones y responder a diferentes legislaciones”, reza el informe. Porque en un país puede gobernar un partido de izquierdas con fuerte conciencia medioambiental y en el otro uno de ultraderecha negacionista del cambio climático. O puede liderar un gobierno que priorice la guerra sobre la defensa de los mares. O mil cosas más. La cuestión es que la salud de los océanos depende de demasiadas voluntades y factores diferentes. De ahí que estxs científicxs reclamen un gobierno mundial del océano.
Un gobierno que mire al 100% por el océano
En sus propias palabras, “el océano no podrá proporcionar los servicios que la sociedad necesita sin una gobernanza eficaz”, por lo que debe confirmarse “una gobernanza oceánica sólida, adaptativa e inclusiva para que la comunidad de investigación marina pueda proporcionar las observaciones, los modelos y las previsiones oceánicas necesarias para comprender el impacto del cambio climático, la contaminación y la crisis de la biodiversidad”. Sin otros intereses en conflicto. Sin lucha de países. Sin titubeos. Un gobierno que mire al 100% por el océano conocedor de la importancia que tiene en tu vida y en la de todas las personas de este mundo. Solo así podremos salvarlo a tiempo.
Además, en este informe, titulado Navigating the Future VI, la European Marine Board también recomienda movilizar inversiones privadas para proyectos sostenibles y no de lavado de imagen. O dicho de otra manera: que se promulguen políticas que hagan que las empresas sean de verdad sostenibles y no solo de cara a la galería. Ah, y realizar observaciones continuas de los océanos, así como transmitir todos los datos recabados, para que la comunidad científica pueda actuar adecuadamente. No es ninguna tontería. No es ninguna locura. Aunque no te lo digan a menudo, tu mundo depende de lo que ocurra en esas aguas en las próximas décadas. Necesitamos un gobierno comprometido.