Vox quiere construir un toro de 300 metros sobre suelo público

En Burgos y triplicando el tamaño de la preciosa catedral de la ciudad

En un espacio público pueden hacerse muchas cosas. Y seguramente se te ocurran en diez segundos treinta o cuarenta opciones más relevantes socialmente que un toro gigante de 300 metros. Pero es lo que tienen pensado construir en la ciudad de Burgos la Academia Española de Tauromaquia y Vox. Y esto va muy en serio: el teniente de alcalde, Fernando Martínez-Acitores, perteneciente a la formación de ultraderecha, ha pedido ceder suelo público a la academia para que esta construya con sus propios fondos un “gran emblema y reclamo”. Imagínatelo: la Estatua de la Libertad, la Torre Eiffel, el Cristo Redentor y el Toro de Burgos.

Aunque no es ahí donde la academia quería colocarlo. Como explican desde El País, primero lo intentó en Madrid, en la capital, pero se encontró con el rechazo de sus gobernantes. Por razones obvias. Sin embargo, los dirigentes de Vox en Burgos consideran que erigir un toro ultracolosal que triplicaría el tamaño de la catedral de la ciudad, una de las más bonitas e importantes de todo el país, es una grandísima idea. Por eso están presionando al partido que gobierna allí para que le proporcionen a la academia el terreno donde se ubicaba el antiguo hospital. Esta última, por su parte, lo reivindica como un homenaje a un “símbolo nacional”.

Así estamos. Por suerte, aún hay sensatez. Por un lado, la alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, se ha reído de la propuesta con un “se califica por sí misma”. No parece que Vox cuente con su gran aliado en esta desfachatez. Por otro lado, el que fuera alcalde de la ciudad y líder de la oposición ahora, Daniel de la Rosa, del PSOE, ha declarado que “en mis 14 años como corporativo en el Ayuntamiento de Burgos jamás hubo una ocurrencia tan disparada como la que ha hecho pública Vox. Demuestra la nula capacidad de propuesta de la ultraderecha, que tiene que recurrir a este tipo de cosas para llamar la atención”.

Por último, porque no olvidemos que esto tiene un trasfondo ideológico profundo, se han manifestado también desde la asociación animalista burgalesa ProAnBur: “Con esta figura del toro, buscan disfrazar de arte algo que está muy lejos de serlo. Carece totalmente de sensibilidad y empatía y, teniendo en cuenta la polémica que existe en nuestro país sobre la tauromaquia, parece una provocación querer imponernos un símbolo que representa la tortura y el maltrato animal”, ha explicado una portavoz de la organización. Y por supuesto que lo es. Eso y otra tontería más para atraer el aplauso y el voto de “lxs patriotas”.