Las muertes por suicidio en hombres triplican a las de las mujeres

Los estereotipos asociados a la masculinidad clásica son una losa para quienes sufren en silencio

Los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística sobre el suicidio en España son contundentes: de las 4.116 personas que murieron por suicidio en 2023 el 73,9% eran hombres, una realidad que viene acentuándose sin parar desde el año 1980. ¿Pero por qué hay más hombres que tratan de ponerle fin al sufrimiento que padecen de esta manera? La periodista especializada en igualdad Eleonora Giovio cree que buena parte de la culpa la tienen los relatos de masculinidad tóxica que tristemente todavía gobiernan nuestra sociedad: aquello de que no mostrarse vulnerable en ningún momento te hace más macho. Un aislamiento emocional que va empeorando las cosas poco a poco.

Pero no es el único estereotipo de género que añade una losa sobre la psique masculina en situaciones de sufrimiento. Y es que no podemos olvidarnos del discursito del éxito. Sí, por muy loco que parezca, muchos hombres se ven incapaces de reconocer que las cosas no les van bien en determinados momentos y hacen un sobreesfuerzo inhumano para tratar de mantener la apariencia de triunfo. Hasta que en un punto concreto resulta literalmente imposible. Acorralados por esta presión social y sin la ayuda de sus seres queridos, a los que no hacen partícipes de su frustración y de su dolor, en ocasiones toman la terrible decisión de quitarse la vida. No es que no quieran vivir: quieren dejar atrás ese dolor.

Además, como añade el psicólogo José Eduardo Rodríguez, entrevistado por Giovio, los hombres cuentan con otros dos factores de riesgo más. Por un lado, una mayor impulsividad, una mayor traducción del pensamiento en el acto. Por otro lado, un mayor consumo de alcohol. Y sí, esto influye mucho porque intensifica los sentimientos depresivos y porque potencia precisamente esa impulsividad. ¿Hay factores biológicos involucrados en todo esto también? Lxs especialistas no lo saben de momento. En cualquier caso, y con independencia de que los haya o no, es obvio que el sistema machista en el que vivimos es responsable de buena parte de este problema. De ahí que sean claves las políticas de igualdad.

“Es un imperativo social abordar este problema. Yo he preguntado en áreas de igualdad de diferentes administraciones públicas y no tienen programas específicos para hombres”, le dice la científica Carmen Galvez a Giovio. Al final, y para que de una maldita vez nos subamos todos al barco, la solución pasa por el feminismo, por la deconstrucción de todos esos prejuicios de género que tanto reprimen a las mujeres y que, como puedes ver, también lo hace con los hombres de otras maneras distintas. Dejémonos de competiciones porque esta sociedad sexista es tóxica para todxs. Es un lastre. Es una cárcel. Y si necesitas ayuda pídela. Hay gente muy preparada que puede ayudarte con lo que sea que sufras.