Ayuso abrirá el primer centro para hombres víctimas de violencia sexual

Vox ha aplaudido la decisión. La izquierda la ve como una provocación al feminismo

Según los datos recopilados por la Comunidad de Madrid, los servicios sanitarios de la región atienden a una media de 100 hombres al año que han sido víctimas de violaciones u otras agresiones sexuales por parte de otros hombres. Para atenderles, ha declarado la presidenta Isabel Díaz Ayuso, el gobierno autonómico abrirá el próximo mes de octubre el primer Centro de Atención Integral Especializado para hombres víctimas de violencia sexual, el cual contará con una financiación anual de 500.000 euros. Una decisión que han aplaudido desde el ala más conservadora del parlamento, con Vox a la cabeza, pero que la izquierda ha calificado como “una provocación al movimiento feminista”.

Porque la cosa no está en el qué sino en el por qué. Al parecer, la Comunidad de Madrid cuenta con dos estamentos que proporcionan valoración y atención a la infancia y a la adolescencia víctima de violencia sexual, pero una vez cumplidos los 18 años ellas pueden continuar sus tratamientos en la red nacional de atención a la mujer y ellos no. De esta manera, dicen desde el gobierno autonómico, “muchos de estos chicos” podrán recibir “tratamientos a partir de los 18 años”. Es sobre el papel una medida razonable. Una manera de no dejar tirados a esos hombres. De ofrecerles asesoramiento en el ámbito social, psicológico, sexual, jurídico y socioeducativo. De protegerlos. De cuidarlos como merecen.

¿Pero es este el objetivo verdadero de Ayuso y su equipo? Para muchas voces de izquierda no. La de Ana Redondo, por ejemplo, ministra de Igualdad, el anuncio es una ocurrencia frívola. Un movimiento político para enfrentar al gobierno de Pedro Sánchez, para intentar herir al feminismo y para arañar votantes de Vox. Una estrategia electoral. Otras voces progresistas lo han calificado de burla. Porque construir un centro específicamente para esto, equiparándolo a la lacra de la violencia sexual sobre las mujeres, tan estructural, tan masiva, con decenas de miles de víctimas anuales solo en la Comunidad de Madrid, resulta excesivo para mucha gente. Una táctica para encender a la oposición.

Y es que todo esto indigna también por otra razón: ese centenar de hombres que sufre violencia sexual de manos de otros hombres, y que debe ser cuidado como cualquier otra persona, podría ser atendido en la sanidad pública si Ayuso no la estuviera desmantelando poco a poco. Y esto no es una opinión cogida con pinzas: el propio Consejo de Europa criticó que el gobierno de la Comunidad de Madrid se estuviera cargando su sistema sanitario público hace dos años. Y la cosa no ha mejorado. Todo lo contrario. Pero claro: en este nuevo centro puede poner a quien quiera al cargo en plan cortijo. Sea como sea, un tema que seguirá dando qué hablar. ¿Tú qué opinas?