Algunas personas tienen más facilidad para exponer sus preocupaciones. Están tristes, enfadadas o ansiosas y simplemente comienzan a contarlo. No tienes que sacarles la información como si fueras un detective. No tienes que insistir para que abran su corazón. No tienes que tratar de adivinar qué está pasando en sus herméticas cabezas. Sin embargo, otras personas son mucho más reservadas. La mayoría de veces por inseguridad. Y, como pareja de una de ellas, puede ser frustrante y desesperante. No obstante, no deberías caer nunca en los comportamientos presionantes. Lo estás empeorando.
No le presiones, de verdad
Esa es la conclusión de una investigación llevada a cabo por investigadorxs canadienses. En la misma, los científicxs sometieron a los participantes a estrategias de control y estrategias de apoyo a la autonomía para descubrir cuáles eran más efectivas a la hora de fomentar la autorrevelación de secretos. Un ejemplo de las primeras sería decirle a tu pareja "las parejas que se quieren se lo cuentan todo" para convencerle de que hable. Un ejemplo de las segundas sería decirle tan solo una vez algo así como "estoy aquí si necesitas hablar", tal como apunta el psicólogo Arash Emamzedeh en investigación.
Debes dejar que elija si quiere abrirse o no
En sus propias palabras, "los resultados mostraron que las estrategia de apoyo a la autonomía se consideran más aceptables y efectivas tanto para mantener la privacidad como para provocar la divulgación". Es decir, que impulsan más fuertemente a la confesión de los secretos emocionales, pero también posibilita en mayor medida que tu pareja decida reservarse esa información si lo cree conveniente. Y quizás pienses que eso es una mierda. Que tú lo que quieres es que siempre confíe en ti y te lo cuente todo. Pero en realidad es bueno. La relación irá mejor si tu pareja siente que puede elegir.
No en vano, apunta nuevamente Emamzedeh, las estrategias de apoyo a la autonomía "se asocian con una mayor cantidad y profundidad de la confesión, satisfacción en la relación, menor apego ansioso y evasivo, y menos ansiedad por abandono y evitación de la cercanía". Según sus estudios en psicología, este enfoque funciona tan bien porque provoca motivación intrínseca y no motivación extrínseca. Es decir, hace que la motivación proceda del interior de tu pareja. A todxs nos gusta sentir que hacemos las cosas porque queremos y no porque alguien está coaccionándonos todo el rato.
Cuanto más presiones, más se cerrará
De hecho, "las estrategias de control, por el contrario, se perciben como irrespetuosas, dominantes, amenazantes, inválidas, que inducen a la culpa, engañan o rechazan". Y lo peor de todo es que decantarte por las estrategias de control puede llevar, y muy probablemente lo haga, a un círculo vicioso negativo. Tú, en tu búsqueda de intimidad emocional, presionas a la otra persona para que abra su corazón. La otra persona, presionada, se cierra más en banda. Tú presionas más. Se cierra aún más. En ese sentido, cuanto antes cambies el chip, mejor. Los malos métodos no conducen a ningún lado.