Las relaciones sociales son determinantes para tu felicidad. Y probablemente no lo percibas así la mayor parte del tiempo: estás, como todo el mundo, mas atentx a otras cosas como la búsqueda del éxito, el placer del consumo o la obsesión con el crecimiento personal. Pero una y otra vez los estudios demuestran que la conexión con otros seres humanos son la clave para la felicidad. Algo que los sudafricanxs saben bien. De hecho, disponen de un término, ubuntu, procedente de las lenguas zulú y xhosa, que les recuerda constantemente la importancia de cuidar el vínculo con los demás: “viene a significar algo así como ‘soy porque tú eres, eres porque somos’”, explica el profesor James Ogude.
O dicho de otra manera: se trata de un concepto que reivindica la unidad entre las personas, la idea de que nadie está ni debe estar totalmente separado del resto, y en consecuencia la responsabilidad que tienes sobre los demás. Como explican desde El Confidencial, medio que se hace eco de esta filosofía ancestral, “los preceptos más comunes de la filosofía ubuntu vienen a decir que hay que tener humanidad hacia los demás, que si todos ganan tú ganas también, y que la humildad y la empatía son fundamentales para conseguir el bien común que al final también es el bien propio”. Una filosofía que te invita a ser mejor persona. Una filosofía que entiende la felicidad como algo inevitablemente colectivo.
Compartir y relacionarse: claves de esta filosofía
Y así es. En los últimos años se ha producido una auténtica explosión de autoconsciencia y autoconocimiento. Y está muy bien. Al fin y al cabo, a nadie le viene mal saber más de sí mismx, comprenderse a sí mismx, cuidarse a sí mismx. No obstante, como revela el ubuntu, “una persona se hace humana a través de las otras personas”. Y no porque lo diga una tradición sino porque esa tradición está defendiendo una verdad a la que no puedes negarte: eres un animal social y tu vida se debería fundamentar a través de las relaciones que creas, de las comunidades que conformas, de las redes de apoyo de las que disfrutas. Todo lo demás implica ignorar una parte fundamental de ti. Perderte en la nada.
Es más, la premisa del ubuntu la comparten muchas otras culturas del mundo. “El concepto de rohayhu, guaraní, se traduciría como ‘la vida de la tribu y su voluntad de vivir, la solidaridad entre iguales’”. De la misma manera, el ayni es un principio precolombino de los pueblos andinos que se basa en la solidaridad económica y social entre comunidades”. Y ojo: todo esto no es una romantización del sentimiento tribal y una demonización de la modernidad en Occidente. Es simplemente reconocer que el individualismo occidental arranca algo esencial de tu alma que no puedes sustituir con ninguna otra cosa. Que un poco más de ubuntu te vendría bien. A ti y a todxs.