Homonacionalismo: la estrategia de Vox para ganarse el voto queer

Lo único que quieren es instrumentalizar a la gente queer vendiéndoles un discurso nacionalista rancio que le haga odiar la inmigración

Los líderes de Vox no son tontos: sus ideas siguen siendo las mismas ideas fascistas de siempre, pero son conscientes de que la sociedad ha cambiado lo suficiente como para no poder prescindir de toda esa gente que queda fuera de sus cánones. Necesitan a la comunidad gay. Necesitan a la comunidad lesbiana. Necesitan a la comunidad bisexual. Porque son comunidades tan grandes que su voto puede definirlo todo. Así se entiende que Santiago Abascal, durante una entrevista para La Sexta, reincidiera en el argumento aquel de “somos los únicos que queremos echar de España a los que quieren lanzarle a ellos desde una azotea o colgarles desde una grúa”.

Pero esto no es un fenómeno español. Es una tendencia internacional. Como apuntan desde Mor.bo, hace dos décadas aproximadamente que la académica Jasbir K. Puar le puso nombre en su libro Terrorist Assemblages: Homonationalism in Queer Times. La idea es sencilla: ya que no podemos prescindir del voto de todxs nuestrxs enemigxs ideológicxs, nos centraremos en enfrentarles diciéndole a la comunidad queer que les respetamos y que les necesitamos para pararle los pies a los temibles inmigrantes que vienen a joderle la vida. Un debilitamiento calculado de la izquierda. Un divide y vencerás tan grande como el fascismo que corre por sus venas.

Y por encima de todo una estrategia de puro electoralismo. Porque no: los líderes de Vox no apoyan los derechos de las comunidades LGTBIAQ+. Es solo de cara a la galería. Por eso Santiago Abascal idolatra a Donald Trump, que ha prohibido el acceso de personas trans al ejército. Por eso no están de acuerdo con el matrimonio homosexual. Por eso siempre se oponen a las políticas de transición sexual. Su corpus ideológico sigue siendo el mismo que hace 100 años. Porque el fascismo no se renueva. Es siempre la misma historia autoritaria y excluyente. Lo único que quieren es instrumentalizar a la gente queer vendiéndoles un discurso nacionalista rancio.

Una instrumentalización que una vez completada daría lugar a un escenario muy diferente. ¿O alguien se cree de verdad que un Vox gobernante, una vez minados los derechos de las personas migrantes, no iba a empezar a meter mano a los derechos LGTBIAQ+? Hay que tener la ingenuidad de un golden retriever. Y esto debe llevarnos a todas las personas decentes a la misma reflexión de siempre: la inclusión nunca puede darse por segmentos. La tolerancia y el respeto a las personas tiene que ser transversal. Mujeres. Inmigrantes. Personas queer. Personas con discapacidad. Estamos todxs en el mismo barco. El que la ultraderecha quiere timonear hacia el horror.