El astrofísico que ha calculado cuánto costaría comprar nuestro planeta

Aunque pensar en que alguien pudiera comprar el planeta suena a disparate, ponerle un precio podría hacernos entender simbólicamente lo valioso que resulta y la importancia de mantenerlo así

A estas alturas de la película, y salvo por algunos irremediables negacionistas, todos somos conscientes de que no nos hemos portado demasiado bien con nuestro planeta. El nacimiento y florecimiento de la llamada sociedad de consumo a lo largo del siglo XX y principios del siglo XXI ha puesto a la naturaleza en jaque. Nos dedicamos a arrasar con todo a una velocidad que nuestro pequeño mundo no puede compensar. Un mundo muy especial. Porque, a veces, parecemos olvidarlo: vivimos en un planeta con unas condiciones únicas.  Tan únicas que lo convierten en un objeto astronómico muy pero que muy valioso.

¿Pero cuán valioso? Greg Laughlin, profesor de astronomía y astrofísica de la Universidad de Yale, ha creado una fórmula matemática para calcular el valor económico que tiene nuestro planeta en estos momentos. En dicha fórmula intervienen factores como el tamaño, la masa, la temperatura, la edad o las condiciones clave para la vida. El resultado es lógicamente descomunal. En concreto, la Tierra tendría un valor económico de 5 cuatrillones de dólares o, para que comprendamos visualmente la cuantía, 5.000.000.000.000.000 de dólares. Es decir, el PIB de todo el planeta en un siglo.

Para muchos esto puede parecer una tontería. Es más, incluso pueden interpretarlo como una extensión del ánimo consumista al ponerle precio a algo que evidentemente no debería tenerlo. Pero el propósito de Greg, el autor del estudio, es precisamente lo opuesto. Como explica en la publicación ecologista Treehugger, "la fórmula te hace darte cuenta de lo preciosa que es la Tierra y espero que nos ayude como sociedad a salvaguardar lo que tenemos". Porque ni con todo el dinero actual del mundo podríamos comprarnos un hogar como este. Sencillamente no nos llegaría. Así de valiosa es la Tierra que habitamos.

Especialmente cuando la comparamos con otros planetas cercanos. Según Laughlin, que durante su estudio ha aplicado la misma fórmula a otros mundos del Sistema Solar, la Tierra es indudablemente el más valioso de los ocho planetas que lo conforman. Y con una diferencia brutal. De hecho, Marte costaría apenas 16.000 dólares y Venus aproximadamente un céntimo. Después de todo, son mundos con unas condiciones que nos impiden vivir en ellos de manera natural. Especialmente en el caso de Venus, donde la temperatura media es de 464 grados centígrados. Ningún otro planeta conocido se acerca a nuestro en valor.

¿Pero entendemos verdaderamente lo que eso significa? ¿Somos conscientes de lo que implicaría, como nos han mostrado muchas ficciones, eso de mudarnos a otros planetas para sobrevivir? No solo sería muy difícil desde el punto de vista práctico. Es que no viviríamos igual. Nunca volveríamos a vivir igual. Este es nuestro hogar. El que conocemos. El que tiene las condiciones perfectas para nosotros. Y nos lo estamos cargando milímetro a milímetro por no valorarlo lo suficiente. O hacemos algo entre todos o el planeta que hereden los tataranietos de los tataranietos de nuestros tataranietos valdrá muchísimo menos.