Trabajadores de hotel cuentan lo peor que se han encontrado en una habitación

Estas historias increíbles harán que pienses que eres de los mejores huéspedes que puede tener un hotel

Hay trabajos mejores que otros. No por su valor en sí sino porque a veces algunos pueden resultar hasta traumáticos traumáticos. Estando de viaje seguramente has podido sentirte ansioso porque si llegas tarde, o te has olvidado algo, o que puedes perderte, que no tienes el dinero suficiente… Pero hay algo por lo que no sueles preocuparte y es el estado en el que dejas la habitación de un hotel en el que te quedas como huésped. Hay algunas personas que intentan dejarlo todo más o menos bien pero hay otras que pueden llegar a ser irrespetuosas con quienes vienen detrás. Y eso es decirlo de forma leve porque aquí reunimos algunas historias difíciles de creer contadas por la habitación de un hotel.

Misofobia

Una de mis amigas tiene misofobia fobia a los gérmenes y nos fuimos de viaje con ella. Nunca dejaba que las mujeres de la limpieza entraran en la habitación y prefería limpiarla ella misma. Un día salimos y se olvidó de colocar la señal de no limpiar. Cuando llegamos al hotel, el gerente pidió hablar con nosotras y lo acompañaba una empleada de la limpieza. Ella explicó que cuando entró a limpiar la habitación sintió un fuerte olor químico y descubrió que provenía de los cajones, donde encontró —nada más y nada menos— que bolsas con orina y caca. Mi amiga, muy tranquilamente, explicó que a las personas con fobias a los gérmenes no les gusta usar o desechar por el inodoro sus necesidades porque el agua se rocía en el aire. Para ellxs es más limpio usar las bolsas, amarrarlas y ponerlas en un cajón.

Ataque volador

Tres chicos en una habitación dejaron todas las ventanas abiertas y las luces encendidas durante la noche. Era pleno verano. Fue horrible: nunca había visto tantos tipos diferentes de insectos volando por la habitación, era verdaderamente aterrador. Corrimos rociando insecticida como si nuestras vidas dependieran de ello, cerramos las ventanas y salimos corriendo de la habitación. Estuvimos una hora sin entrar. Cuando entramos nuevamente para limpiar vimos el suelo completamente negro con todos los insectos muertos. Todavía puedo escuchar el crujido al pisarlos.

La rara pareja

Trabajé en la recepción de un hotel hace unos años. Atendí a una pareja por la mañana, fueron muy amables, dijeron que disfrutaron de su estancia y se marcharon. Luego el servicio de limpieza fue a su habitación para limpiarla, la pobre mujer parecía conmocionada. Tuvo que avisarme porque depende del estado de la habitación debo grabarlo con una cámara para documentarlo si hay algo fuera de los normal. Encontramos dos consoladores grandes, como con dos cabezas, gran cantidad de bolsitas herméticas con polvo en el interior, jeringas algunas usadas, algunas aún con tapa. Además había como cinco botellas de aceite para bebé de tamaño grande. También encontramos manchas de heces y sangre por toda la ropa de cama. Poco después dejé el trabajo.

Secuestro

Un cliente se quedó allí varios días. Pidió expresamente que no se entrara a limpiar la habitación. Cuando pasó una semana, una de las empleadas de la limpieza entró porque no recordó el aviso. Cuando entró encontró a una chica desnuda amarrada a la cama con una cámara en ella. El hombre la había mantenido atada durante tres días seguidos y estaba retransmitiéndola en vivo en algún lugar.

Reacción alérgica

Era vigilante de seguridad. Recuerdo que una vez un cliente pidió una ambulancia debido a que, según explicó, había sufrido algún tipo de "reacción alérgica”. Entramos en la habitación para ver qué había sucedido: el baño estaba completamente lleno de diarrea verde y negra, con manchas de sangre. El olor era horrible, nunca había olido algo tan desagradable. Al verlo vomité y salí rapidísimo. Quienes tuvieron que limpiar la habitación lo pasaron realmente mal.

Mal gusto

Uno de mis compañeros de trabajo encontró una caca dentro de un condón que estaba, a su vez, atado a la puerta del microondas. Es, definitivamente, la cosa más extraña y desconcertante que he escuchado.

Suicidio

Lo peor que encontré fue un cadáver. Estaba ahorcado. Alguien decidió suicidarse en la habitación del hotel colgándose del piso de arriba. Llevaba allí unos días cuando lo encontramos.

Espectáculo de horror

Una pareja llegó a la recepción para hacer el check out temprano. Según sus rostros parecía que, claramente, habían estado peleándose a puñetazos. Aseguraron que estaban bien y que no me preocupara. Decidieron pagar en efectivo y me dijeron, literalmente: "Lo sentimos mucho, nos hemos peleado, hay sangre en la habitación y somos VIH positivos". Luego se fueron. La habitación era un espectáculo de horror absoluto, tuvimos que contratar a un equipo de limpieza especial y reemplazar básicamente todo el mobiliario.

Vacunas

Encontré de forma casual una jeringa debajo de un colchón. La encontré porque sentí un pinchazo en la punta de mi dedo. Estaba metiendo una sábana debajo de la cama, y ​​fue en ese momento cuando me pinché. Eran dos agujas de insulina que estaban ahí debajo. Me llevaron rápidamente al hospital, me tuve que poner varias vacunas contra la hepatitis y una contra el tétanos. Después tuve que tomar dos medicamentos diferentes para la prevención del VIH durante un mes y hacerme análisis de sangre mensuales durante aproximadamente un año.

Orina

Trabajé en una estación de esquí de lujo. Una familia dejó que su hijo que estaba aprendiendo a ir al baño orinara detrás del inodoro y debajo del fregadero durante toda su estancia. Luego pusieron nuestras toallas blancas encima para "ayudar a limpiar el desorden". Todo el lugar olía como un recinto de rinocerontes. Arruinó las toallas y tuvimos que tirarlas.