Desesperados en un país con pocas posibilidades para jóvenes, muchos de nosotros hemos pasado horas y horas rebuscando en portales digitales. Primero, mirando trabajos de lo nuestro. Después, tras abrir una botella de vino y llorar porque no cumplimos los requisitos de experiencia, hemos acabado en ofertas de todo tipo. Desde profesores particulares hasta repartidores de flyers o captadores de ONGs.
En esta búsqueda infernal todos nos hemos topado con ofertas que rozan la esclavitud, lo indigno o que simplemente parecen sacadas de la época feudal. Por eso nace Mierda Jobs, para denunciar las ofertas abusivas que abundan en los portales de búsqueda de empleo, esperando para aprovecharse de alguien sin recursos que se vea forzado a aceptarla para llegar a final de mes.
Algunos de los muchos timos que denuncian son ofertas por 2€ la hora recordemos que el salario mínimo interprofesional son 5,50 euros —aproximadamente— por hora efectivamente trabajada o jornadas laborales de 50h semanales para qué descansar, ¿quién querría una vida?.
Alejandra, la persona que se esconde detrás de esta cuenta, explica a Público que “la cuenta nació después de charlar con sus amigas sobre los sueldos miserables que percibían y la imposibilidad de llegar a independizarse”. La cuenta se alimenta de las ofertas de mierda que recibe y que le envían, para demostrar que la caradura de muchos empleadores no es algo residual y anecdótico sino que es el pan de cada día de muchísimas personas. Un espejo necesario que refleja como pocos las miserias de nuestro mercado laboral.