‘Vidas pasadas’: una película de amor que nos habla de todo eso que pudo ser y no fue

Una de las mejores películas de este año se aleja, por fin, de todos los tópicos. Y sí, nos ha encantado

En Corea, es conocido un concepto budista llamado “In-Yun”. Es la creencia que la interacción entre dos personas en esta vida está enraizada en las interacciones o casi interacciones que tuvieron en sus vidas pasadas. El concepto sugiere que algunos encuentros no son, como solemos asumir, accidentales, sino que son fruto del destino cósmico que “nos toca en el hombro”. El Universo nos está diciendo que esa persona es importante en nuestro camino.

Este concepto aparece en una de las mejores películas del año, ‘Past Lives’ (Vidas pasadas). Una obra de arte que se aleja de los tópicos sobre el amor y nos estremece con su visión de las relaciones humanas. Dirigida por Celine Song, cuenta la historia de Nora y Hae Sung, antiguos compañeros de clase en una escuela de Seúl, en Corea del Sur. Su amistad termina cuando Nora se muda a Canadá. Y 12 años después, Nora se da cuenta de que Hae Sung ha intentado ponerse en contacto con ella por redes sociales. Vuelven a conectar, pero tendrán que pasar otros 12 años para que se reencuentren durante una visita de él a Nueva York.

¿Las razones para ver esta peli?

No es una historia convencional. Es una película sobre los orígenes y el lugar que ocupan las raíces dentro de nuestro cuerpo, sobre los caminos que dejamos de coger y cómo aceptamos las decisiones que nos llevaron a un sitio que no imaginábamos. Porque, como se dice en la peli, “cuando se deja algo atrás se ganan otras cosas”, algo con lo que podemos sentirnos muy identificadxs todxs. Además, los actores masculinos son retratados de forma distinta. Son capaces de comunicarse y hablar de cómo se sienten abiertamente.

‘Past Lives’, producida por A24 y distribuida en España por Elástica Films y Wanda Films, nos enseña que el amor se transforma y te desafía a lo largo de las décadas. Los sentimientos humanos son inabarcables, y alejados de cualquier sencillez. Todxs tenemos un amor que nos hace preguntarnos: “¿qué hubiese pasado si?...” Esa respuesta e hipótesis nos hace dudar de nuestras decisiones pasadas y nos lleva a imaginar nuestras vidas probables, algo que esta película sabe retratar con inteligencia.

Son muchxs los que han terminado saliendo del cine con los ojos enrojecidos de tanto llorar. Pero no porque sea el típico drama estadounidense lleno de lugares comunes, sino por la compasión y amabilidad con la que se trata a los personajes, que te inundan de un amor que permea la pantalla.

A pesar de que pueda dar la sensación a primera vista de que la cinta trata sobre un amor perdido, en realidad nos habla del amor en todas sus facetas. En una voz narrativa que mezcla el pasado, el presente y el futuro, nos enseña todo el espectro de emociones humanas por las que habitamos este mundo. Sin duda, es una de las mejores películas de este año y candidata a los grandes premios.