El mundo del streaming está un poquito patas arriba. Tras años de consolidación y multiplicación de plataformas, ha llegado un punto en el que mucha gente no puede costearse tantas suscripciones a la vez y ha comenzado a abrazar la estrategia de la cancelación intermitente. Es sencilla y quizá incluso la hayas aplicado ya alguna vez: te suscribes a una plataforma, ves todo lo que tienes pendiente en ese mes y luego te das de baja hasta dentro de unos meses cuando se hayan acumulado nuevamente cositas suculentas. Y obviamente esto está puteando a las compañías de streaming, que están poniendo en marcha una nueva técnica de comercialización: la venta de series sueltas.
En concreto, es Amazon Prime Video quien ha dado el primer paso en esta dirección. Si entras en la plataforma ahora mismo verás que tienes más de 300 temporadas de series para comprar a tu disposición. Desde La Casa del Dragón, original de HBO, al nuevo spinof de The Walking Dead, de la AMC, y pasando por Friends, Mad Men o Sexo en Nueva York. Y no tienes que comprar la serie entera: puedes pillar temporadas a tu ritmo según te vaya apeteciendo o vayas pudiendo. Así te ahorras tener que pagar la suscripción de cada plataforma de streaming solo para ver una temporada de una serie concreta. Bien podría ser el inicio del fin de la dictadura de la suscripción. Quién sabe.
Aunque obviamente este sistema tampoco es perfecto. Por un lado porque, como dicen desde Computer Hoy, “la solución de Prime Video solo tiene a la venta las versiones SD y HD, pero no la versión 4K”, lo que hace que si tienes una megatele en el salón y te mola ver las series como si estuvieras en el cine te quedes un pelín frustradete. Y por otro lado, porque los precios de momento no parecen muy modestos, la verdad. ¿Una temporada por 16,99 euros? ¿Un capítulo por 2,99 euros? No sé si sales ganando. Lo bueno es que algunas temporadas son largas y tienes serie para rato, pero aun así el precio es elevado a mi parecer. Quizá con competencia se vayan moderando.
En cualquier caso, y teniendo en cuenta que cada persona tiene su ritmo, su tiempo libre, su agenda de ocio, sus recursos económicos y, en fin, su idiosincrasia particular, está guay tener el mayor número de alternativas posibles. Además, y con la compra de la serie, y salvo que esa plataforma en cuestión quiebre, en este caso Prime Video, la tienes para siempre contigo, algo que en casos como Friends, probablemente la serie más revista de la historia, puede ahorrarte muchas suscripciones a lo largo de tu vida. La tendrá siempre ahí en tu cuenta disponible. En cualquier caso, lo que está claro es que tener 8 suscripciones mensuales todo el año resulta insostenible para la mayoría.