Suenan unas campanas, en escena aparece un plano de la Catedral de Toledo, unos segundos después empieza a sonar Ateo, la nueva canción de C. Tangana y Nathy Peluso, podríamos decir, una de las colaboraciones más esperadas de los últimos tiempos. Tanto C. Tangana como Nathy Peluso se han alzado entre la multitud generando un ejército de fans que siguen de cerca absolutamente todo lo que hacen y es que, ambxs, han sabido destacar creando música nueva, distinta, con un sello particular que te hace saber que si suena así, es que se trata de alguno de ellos. A finales de verano los artistas fueron vistos en Toledo y, aunque todo apuntaba que estaban colaborando, hace muy poco que se confirmó.
El avance de la canción dejó las redes a punto de caramelo porque todo apuntaba a que el videoclip en sí la melodía también pero más las imágenes no dejarían a nadie indiferente y es que no solo ellos aparecen en escena, han colaborado con muchos personajes reconocidos: María Pombo, Brays Efe, Cayetana Guillén Cuervo, Miranda Makaroff, Elizabeth Duval y hasta Josep Pedrerol. La pregunta que te harás es: ¿por qué? ¿Qué pinta, por ejemplo, Pedrerol en este videoclip? La lectura que se hace de que aparezcan en escena tantos rostros comentando la canción es una crítica a las redes sociales, a los medios de comunicación y en parte, también, al espectáculo y a los vídeos de Youtube. Es más, en el avance que compartieron los artistas, la discusión que hay en escena es si está bien o mal que C. Tangana le tire del pelo a Nathy Peluso en el videoclip.
En Ateo hay muchos ingredientes que la hacen destacar: el erotismo, se trata de una bachata que combina sonidos electrónicos clásicos de la musicalidad de C. Tangana, la iconografía religiosa, el videoclip fue grabado en el interior de la Catedral de Toledo y esa unión entre lo sagrado y lo profano. Es un tema que habla de un amor que es comparable o equiparable a la espiritualidad que da la religión, es un amor visto desde su sentido más sagrado. Es más, al principio, se oye a Nathy Peluso diciendo: “este amor es como una religión” y el estribillo canta: “yo era ateo, pero ahora creo, porque un milagro como tú ha tenido que bajar del cielo”.
Ambos artistas han indagado con su música dentro de los géneros latinos. Lo vimos al principio con Nathy Peluso y lo hemos visto con C. Tangana en todo el repertorio de El Madrileño. Es por ello que no sorprende que se trate de una bachata. Lo que más sorprende, realmente, del videoclip por cierto, escrito y dirigido por el propio Pucho son todas las alusiones religiosas que se hacen, comparan imágenes que aparecen pintadas en las paredes con el linchamiento mediático que sufren los artistas muchas veces. Eso sí, hay una escena muy difícil de olvidar: la de Nathy Peluso desnuda sosteniendo la cabeza decapitada de C. Tangana, como si ambos representaran a Judith y Holofernes, solo que en este caso un poco más modernos y perseguidos por las cámaras de nuestros iPhones.
Y sí, es de esas canciones que sonarán en las discotecas y que son para bailar pegaditxs. Son de esas canciones con pasión, mensaje, que serán todo un éxito y que, en pocas horas, habrá superado el millón de visualizaciones.