Hace tiempo que sabemos que el pop lo lideran las mujeres: Madonna, Adele, Britney Spears... Lo han revolucionado y han hecho virar las tendencias del género a nuevas melodías que han acabado sonando en todo el mundo. Pero parece que este año esa parte de la sociedad que parecía ignorarlas ha decidido rendirse por fin y aceptar que son las mujeres las que reinan el pop.
Lo hemos visto con el éxito inabarcable de artistas como Chappell Roan, Sabrina Carpenter o Charli XCX. Precisamente las tres cabezas de cartel del Primavera Sound 2025. También hemos presenciado la consolidación como reina histórica del pop de Taylor Swift, que con su Eras Tour ha movilizado a millones de personas en las ciudades más importantes del mundo. Este año fue el del “Brat Summer”, el del estribillo pegajoso de “Hot To Go” o alguien cantando “that’s that me espresso”.
Pero la celebración del éxito femenino no siempre fue así. Como recupera el medio Dazed, en 2019, la BBC publicó una investigación que evidenciaba la brecha de género en el pop. Según datos de la Official Charts Company, en 2018, tres veces más hombres que mujeres aparecieron entre las 100 canciones más populares del Reino Unido, con 91 artistas masculinos o grupos de hombres frente a solo 30 mujeres.
En Estados Unidos, un estudio reveló que entre 2013 y 2018 el 90,7% de los nominados al Grammy eran hombres.
Ese mismo año, en los Grammys, solo una mujer, Alessia Cara, ganó en una categoría importante, lo que hizo que #GrammysSoMale se volviera tendencia en X (antes conocido como Twitter).
Seis años después, los Grammy 2024 cuentan una historia diferente: solo un hombre, Jon Batiste, ha sido nominado en las categorías principales, y las mujeres han arrasado en todas. En el Reino Unido, de las 16 canciones que alcanzaron el número uno este año, 11 fueron de mujeres.
También cambian los temas
El pop de 2024 ya no es masculino, está hecho por mujeres y desafía las normas patriarcales. Sabrina Carpenter, por ejemplo, combina country moderno, R&B e inspiración de la música de Fleetwood Mac en su álbum “Short n’ Sweet”, con letras que desafían la idea de cómo tiene que vivir una mujer su sexualidad.
Charli XCX, en “Brat”, se abre en canal con letras que conectan con las dudas existenciales de cualquier mujer joven hoy en día y a la vez nos da material para bailar hasta más no poder. Por otro lado, Chappell Roan visibiliza el amor lésbico en su álbum “The Rise and Fall of a Midwest Princess”.
En un año marcado por retrocesos en los derechos de las mujeres, sus voces nos dicen que sí se puede. A pesar de que la misoginia persiste en el mundo, es alentador saber que, al menos en la música, este fue el año en que las mujeres tomaron el control del pop. Katy Perry lo dijo bien: “Es el mundo de las mujeres y tienes suerte de vivir en él”.